Mientras el avance del Kremlin en el este contra las fuerzas ucranianas se tambalea, el presidente ruso Vladimir Putin ha proclamado que la central nuclear de Zaporizhzhya, en Ucrania, es un activo federal ruso, absorbiendo su infraestructura y personal.
La mayor central nuclear de Europa fue tomada por los soldados rusos en marzo, y los trabajadores ucranianos gestionan ahora las operaciones diarias bajo asedio, lo que ha suscitado la preocupación del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) por la vulnerabilidad del emplazamiento.
Putin ordenó la toma oficial de los activos nucleares de Zaporizhzhya en un decreto que se hizo público el miércoles por la agencia de noticias Tass en Rusia. El decreto decía: “El gobierno ruso tomará medidas para establecer la propiedad federal de la central nuclear de Zaporizhzhya y otras instalaciones necesarias para su funcionamiento”.
Al parecer, Putin también dio el visto bueno a la formación de la Empresa Unitaria Estatal Federal de la Central Nuclear de Zaporizhzhya, que “concedió a la sociedad anónima Operadora de la Central Nuclear de Zaporizhzhya el estatus de organización con operaciones en el ámbito de la energía nuclear”, según Tass.
La decisión de Putin ha sido rechazada categóricamente en respuesta por la agencia oficial de energía de Ucrania, que también ha anunciado que su director tomará el control de la central.
Según Reuters, Petro Kotin, el responsable estatal de energía de Ucrania, declaró en un discurso en vídeo subido a Telegram que “todas las decisiones posteriores sobre el funcionamiento de la central se tomarían directamente en la oficina central de Energoatom”.
Según Kotin, “seguiremos operando de acuerdo con la legislación ucraniana, dentro del sistema energético ucraniano y dentro de Energoatom”.
La fábrica está situada en Zaporizhzhya, que el miércoles Putin incorporó formalmente a Rusia tras un falso referéndum. Cuatro zonas de Ucrania parcialmente ocupadas por Rusia han sido ya anexionadas por este país.
Las repúblicas populares de Donetsk y Luhansk, Zaporizhzhya y Kherson fueron incorporadas oficialmente a la Federación Rusa el miércoles por Moscú.
En medio de un intenso bombardeo hace tres semanas, Ucrania se vio obligada a cerrar el complejo nuclear. Cuando Putin emitió su orden, Ucrania estaba debatiendo si volver a poner en marcha Zaporizhzhya para proteger la maquinaria.