MOSCÚ (AP) – Rusia suspendió el lunes su misión en la OTAN y ordenó el cierre de la oficina de la alianza en Moscú en represalia por la expulsión de diplomáticos rusos por parte de la OTAN.
A principios de este mes, la OTAN retiró la acreditación de ocho funcionarios rusos en su sede de Bruselas, diciendo que cree que han estado trabajando secretamente como oficiales de inteligencia rusos. La OTAN también redujo a la mitad el tamaño del equipo de Moscú en su sede, de 20 a 10.
Moscú ha rechazado las acusaciones por considerarlas infundadas. El Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, dio la respuesta de Moscú el lunes, anunciando la suspensión de la misión de Rusia en la OTAN y el cierre de las oficinas de enlace e información militar de la alianza en la capital rusa.
Denunció que la acción de la alianza ha confirmado que “la OTAN no está interesada en ningún tipo de diálogo de igual a igual o de trabajo conjunto”, y añadió que “no vemos ninguna necesidad de seguir pretendiendo que pueda haber algún cambio en un futuro próximo”.
Lavrov añadió que los contactos entre la alianza militar occidental y Rusia podrían mantenerse a través de la embajada rusa en Bélgica.
“Como resultado de los movimientos deliberados de la OTAN, prácticamente no tenemos condiciones para el trabajo diplomático elemental y en respuesta a las acciones de la OTAN suspendemos el trabajo de nuestra misión permanente ante la OTAN, incluyendo el trabajo del enviado militar jefe, probablemente a partir del 1 de noviembre. O puede que se demore varios días más”, dijo Lavrov.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia dijo en un comunicado separado que las acciones de la OTAN “confirman que no están interesados en un diálogo igualitario y en el trabajo conjunto para desescalar las tensiones político-militares”.
“La línea de la alianza hacia nuestro país es cada vez más agresiva”, señaló el ministerio. “La ‘amenaza rusa’ se infla para reforzar la unidad interna de la alianza, para crear la apariencia de su ‘relevancia’ en las condiciones geopolíticas modernas”.
La portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, dijo que la alianza ha tomado nota de la declaración de Lavrov, pero añadió que aún no ha recibido una notificación oficial de Moscú.
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, dijo en Luxemburgo que “esta decisión tomada en Moscú prolongará aún más la difícil situación en la que nos encontramos, este período de congelación que ya lleva algún tiempo”, y añadió que “esto pondrá una tensión más seria en las relaciones”.
“Alemania ha impulsado repetidamente el diálogo con Rusia en el seno de la OTAN durante los últimos años”, señaló Maas. “Tenemos que reconocer una vez más, que Rusia aparentemente ya no lo es. Eso es más que lamentable”.
La misión rusa no tiene su sede en el cuartel general de la OTAN, sino en un frondoso barrio del sur de la capital belga, Bruselas.
La OTAN suspendió la cooperación práctica con Rusia en 2014 tras la anexión de la península ucraniana de Crimea, pero ha mantenido abiertos los canales para reuniones de alto nivel y para la cooperación entre militares. Pero el Consejo OTAN-Rusia, su foro preferido, solo se ha reunido esporádicamente desde entonces.
En medio de la tensión de los lazos, Moscú ha expresado repetidamente su preocupación por el despliegue de las fuerzas de la OTAN cerca de las fronteras rusas, describiéndolo como una amenaza para su seguridad. Rusia y la alianza también se han culpado mutuamente de realizar ejercicios militares desestabilizadores cerca de las fronteras.