El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que propondrá a la representante proisraelí de Nueva York, Elise Stefanik, como embajadora ante las Naciones Unidas.
En una declaración al New York Post, Trump destacó: “Es un honor para mí nombrar a la presidenta Elise Stefanik para que se desempeñe en mi gabinete como embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas. Elise es una luchadora increíblemente fuerte, tenaz e inteligente que defiende el principio de ‘Estados Unidos primero’”.
Por su parte, Stefanik ha confirmado que aceptará la nominación. En conversación con The Post, expresó: “Es un verdadero honor para mí recibir la nominación del presidente Trump para servir en su gabinete como embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas”.
Además, señaló: “Durante mi conversación con el presidente Trump, le dije lo profundamente honrado que me siento de aceptar su nominación y que espero ganarme el apoyo de mis colegas en el Senado de los Estados Unidos”.
Stefanik también se refirió al triunfo de Trump en las elecciones, señalando: “La histórica victoria aplastante del presidente Trump en las elecciones ha dado esperanza al pueblo estadounidense y es un recordatorio de que se avecinan días mejores, tanto en el país como en el extranjero”.
Para la legisladora, Estados Unidos sigue siendo el faro del mundo, pero también insistió en la necesidad de exigir que los amigos y aliados del país sean “socios fuertes en la paz que buscamos”.
Reconocida por su apoyo a Israel, Stefanik ha sido una figura clave en la lucha contra el antisemitismo en los campus universitarios estadounidenses. Su interrogatorio firme en otoño pasado llevó a la dimisión de los presidentes de Harvard y la Universidad de Pensilvania, luego de que estos no condenaran los llamados al genocidio contra los judíos.
Este año, en una reunión del Caucus de la Knéset para Estudiantes Judíos y Pro-Israel, Stefanik criticó la decisión del presidente Joe Biden de pausar el envío de bombas a Israel. Advirtió que a menos que Israel reciba el armamento necesario para “lograr la victoria total”, Estados Unidos podría enfrentarse a un escenario similar al ataque terrorista del 7 de octubre.