El intercambio de prisioneros entre Estados Unidos e Irán está en marcha, ya que un avión de Catar que transporta a los cinco prisioneros estadounidenses ha despegado de Teherán esta tarde (lunes). El avión aterrizará en Doha a última hora de hoy.
El acuerdo se alcanzó el mes pasado cuando, como primer paso, Irán liberó a cuatro ciudadanos estadounidenses de la prisión de Evin, en Teherán, y los puso en arresto domiciliario, donde se unieron al quinto, que ya estaba bajo arresto domiciliario. No se ha revelado el nombre de los presos.
Como parte del acuerdo, también se liberó a cinco ciudadanos iraníes encarcelados en Estados Unidos por diversos delitos, y la Administración Biden accedió a emitir una exención general para que los bancos internacionales transfirieran 6.000 millones de dólares en dinero iraní congelado de Corea del Sur a Catar sin temor a sanciones estadounidenses.
La Administración Biden ha afirmado que, en virtud del acuerdo, los miles de millones liberados se utilizarían exclusivamente con fines humanitarios. Sin embargo, el presidente iraní, Ebrahim Raisi, declaró que humanitario significa lo que el gobierno iraní diga que significa, alimentando la preocupación de que el dinero se utilice para financiar el terrorismo.
Los detractores del acuerdo han advertido de que, al aceptar un intercambio en el que Irán recibe 6.000 millones de dólares, además de la devolución de sus ciudadanos, Estados Unidos ha incentivado a Irán a tomar más rehenes en el futuro.