Irán confirmó el martes que había realizado una prueba reciente de un misil balístico de mediano alcance después de que las potencias occidentales criticaran duramente el lanzamiento del 1 de diciembre.
“Continuamos con nuestras pruebas de misiles y esta reciente fue una prueba significativa”, informó la agencia de noticias Fars, citando al comandante aeroespacial de la Guardia Revolucionaria, el general de brigada Amirali Hajizadeh.
“La reacción de los Estados Unidos demostró que era una gran cosa para ellos y que los disgustó”, dijo la conservadora agencia de noticias, y agregó que Irán realizó entre 40 y 50 pruebas de misiles por año.
Irán ha seguido adelante con su programa de misiles balísticos después de frenar gran parte de su programa nuclear bajo un acuerdo histórico de 2015 con las principales potencias.
Una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU adoptada después del acuerdo, pide a Irán que se abstenga de probar misiles capaces de llevar un arma nuclear, pero no prohíbe específicamente a Teherán los lanzamientos de misiles.
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió a solicitud de Gran Bretaña y Francia el 4 de diciembre para discutir la última prueba que ambos gobiernos describieron como “provocativa” e “inconsistente” con la Resolución 2231.
Gran Bretaña dijo que los tipos de misiles disparados tenían capacidades que “van más allá de las legítimas necesidades defensivas”.
Irán ha desarrollado varios tipos de misiles balísticos con un alcance de hasta 3.000 kilómetros (1.875 millas), suficientes para llegar a Israel y bases occidentales en toda la región.
En su informe, Fars no especificó la fecha de la última prueba ni dijo qué tipos de misiles fueron disparados.
Washington, que renunció al acuerdo nuclear en mayo, describió la prueba como una “violación” absoluta de la Resolución 2231 y pidió al Consejo de Seguridad que la condenara.
Pero Moscú, con poder de veto, ha defendido el derecho de Teherán a realizar las pruebas de misiles, y la reunión del 4 de diciembre terminó sin una declaración conjunta ni ningún plan para acciones de seguimiento.
El Consejo debe reunirse nuevamente el 19 de diciembre para una revisión regular de la implementación de la resolución.
Irán ha recibido certificaciones periódicas del cumplimiento de las disposiciones del acuerdo nuclear por parte del organismo de control atómico de la ONU.
La crítica occidental se ha centrado, en cambio, en el programa de misiles de Teherán y sus intervenciones militares en la región.