El Gobierno iraní ha convocado al embajador británico después de que éste solicitara públicamente la liberación de los periodistas detenidos en Irán, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores del país persa.
Reacción a las declaraciones del embajador británico
La convocatoria al embajador británico en Irán, Simon Shercliff, se produjo tras su homenaje a los periodistas en el Día Nacional de los Periodistas en Irán. Shercliff hizo un llamamiento en línea a Teherán para la liberación de los detenidos, incluyendo periodistas, lo que Irán ha considerado «contenido intervencionista».
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán expresó su «enérgica protesta» contra lo que considera posturas «desmedidas e irresponsables» y contrarias a «las normas y reglamentos diplomáticos».
Más de 90 periodistas han sido detenidos o interrogados en Irán desde las protestas nacionales del año pasado, según el diario reformista Shargh. La mayoría han sido liberados, pero el destino de once periodistas aún es incierto.
Detalles sobre los periodistas detenidos y las protestas
Las detenciones y los interrogatorios a periodistas se incrementaron tras las manifestaciones masivas de septiembre de 2022. Estas surgieron a raíz de la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una joven kurda-iraní detenida por violar el estricto código de vestimenta del país.
Cientos de personas, incluyendo fuerzas de seguridad, murieron y miles fueron arrestadas durante estos eventos, calificados por las autoridades como «disturbios» instigados por Occidente.
Entre los detenidos, los periodistas Niloufar Hamedi y Elaheh Mohammadi cubrieron la muerte de Amini y permanecen en custodia. Ambos enfrentan juicios separados en Teherán, acusados de propaganda contra el Estado y conspiración contra la seguridad nacional.
Repercusiones de la intervención del embajador británico
La intervención del embajador británico y la posterior convocatoria por parte de Irán subrayan las tensiones en las relaciones diplomáticas entre ambos países. La petición de liberación de los periodistas y la firme respuesta de Irán podrían generar nuevos desafíos en las relaciones bilaterales.
La postura de Shercliff refleja una creciente preocupación internacional por la situación de los derechos humanos en Irán, aunque el Gobierno iraní ha rechazado enfáticamente cualquier interferencia externa en sus asuntos internos.
La convocatoria del embajador británico marca un punto crítico en la diplomacia entre los dos países, cuyas relaciones ya se encontraban en un estado delicado.
Situación de los derechos humanos y libertad de prensa en Irán
La detención de periodistas y la respuesta de Irán al llamado del embajador británico resaltan la compleja situación de los derechos humanos y la libertad de prensa en el país. La posición de Irán frente a la petición del embajador indica una firme postura en la gestión de sus asuntos internos.
El número de periodistas detenidos, interrogados y en espera de juicio es una muestra de los desafíos que enfrenta la libertad de expresión en la República Islámica.
Los juicios a puerta cerrada y las acusaciones de propaganda y conspiración reflejan una tensión subyacente en el país en torno a la libertad de prensa y la relación con Occidente.
La situación actual subraya la necesidad de una continua observación y comprensión de los acontecimientos relacionados con la libertad de prensa en Irán, sin perder de vista la complejidad de la política interna y externa del país.