Un artículo de la Agencia de Noticias de Estudiantes Iraníes reportó que el ataque nocturno en Teherán estuvo dirigido contra la base aérea de Nevatim y una instalación militar en el Monte Hermón.
Según un artículo sin firma que parece alinear con la perspectiva oficial del régimen, la base de Nevatim fue seleccionada como blanco en represalia por un asalto que originó desde allí al consulado iraní en Damasco a comienzos de mes.
El reporte añadió que un centro de inteligencia militar en el Monte Hermón también fue objetivo, marcando el ataque como una respuesta a continuos asaltos israelíes contra posiciones iraníes en Siria.
“Se suponía que las ciudades israelíes no iban a ser atacadas en esta operación, aunque los ciudadanos israelíes experimentaron la peor noche de sus vidas”, se lee en la columna. No se hizo mención de una niña beduina israelí, reportada como la única herida en Israel.
ISNA reportó que los misiles lanzados por Irán “alcanzaron los objetivos predeterminados”, aunque Israel intenta minimizar el impacto del ataque.
La agencia calificó la ofensiva, en la cual aproximadamente el 99% de los más de 300 proyectiles fueron interceptados, como un triunfo significativo para Teherán, ilustrando su relato con una imagen digital de la defensa aérea activa sobre la Cúpula de la Roca.
Además, se interpretan los informes de que Estados Unidos no participará en un contraataque israelí como indicativo de que Irán ha reforzado su posición, hasta el punto de disuadir incluso a Washington de involucrarse.
“Esta operación elevó el nivel de disuasión de la República Islámica de Irán, y los intentos occidentales repetidos por disuadir a Irán de una respuesta a Israel resultaron inútiles”, indicó la columna.
En la misma línea, la columna resaltó declaraciones del general de división Ali Bagheri, jefe de la fuerza aérea iraní, quien afirmó que Irán tenía la capacidad de ejecutar un ataque diez veces mayor, pero que aún no busca un enfrentamiento total.