El jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán dijo el sábado que su país no superará el 60 % de enriquecimiento de uranio, incluso si su país no puede acordar con las potencias mundiales una vuelta al acuerdo nuclear de 2015.
Preguntado por la agencia de noticias rusa Sputnik sobre la posibilidad de que los niveles de enriquecimiento aumenten más, Mohammad Eslami respondió: “No”.
Además, afirmó que “todas nuestras actividades nucleares se llevan a cabo según los acuerdos, estatutos y reglamentos del Organismo Internacional de Energía Atómica.”
El uranio enriquecido al 60 % puede enriquecerse rápidamente hasta el 90 %, el nivel necesario para construir una bomba atómica. Los funcionarios occidentales han dicho que no hay ningún uso civil creíble para el uranio enriquecido al 60 %, más allá del deseo de acercarse al 90 %.
Las conversaciones para reactivar el acuerdo nuclear de 2015 se reanudarán el próximo lunes, dijo el jueves el diplomático de la UE que preside las negociaciones, instando a “acelerar el ritmo”.
Los funcionarios han dicho que el acuerdo quedaría obsoleto en cuestión de semanas si Irán sigue intensificando sus actividades nucleares como lo viene haciendo desde 2019, un año después de que Estados Unidos abandonara el histórico acuerdo y volviera a imponer sanciones.
“Las conversaciones de Viena se reanudarán el lunes 27 de diciembre. La Comisión Conjunta del JCPOA se reunirá para discutir y definir el camino a seguir”, escribió en Twitter el diplomático de la UE Enrique Mora, en referencia al acrónimo del nombre formal del acuerdo.
“Importante acelerar el ritmo de las cuestiones clave pendientes y avanzar, trabajando estrechamente con EE. UU… Bienvenidos a la octava ronda”.
Las negociaciones se reanudaron en noviembre, tras un paréntesis de cinco meses, para tratar de restablecer el acuerdo, que debía ofrecer a Irán un alivio de las sanciones a cambio de la limitación de su programa nuclear.
Los diplomáticos de las partes del acuerdo -China, Gran Bretaña, Francia, Alemania y Rusia- están en conversaciones en Viena con Irán y Estados Unidos, y ambas partes se niegan a mantener un contacto directo.
El negociador estadounidense Rob Malley advirtió el martes de un “periodo de crisis creciente” si la diplomacia no lograba restablecer el acuerdo.
Irán afirma que solo quiere desarrollar una capacidad nuclear civil, pero las potencias occidentales dicen que sus reservas de uranio enriquecido van mucho más allá y podrían utilizarse para desarrollar un arma nuclear.
Teherán no superará el límite del 60 % de enriquecimiento de uranio.