TEHERÁN, Irán – El gobierno de Irán, que ha sido golpeado por sanciones, aprobó el miércoles un plan para eliminar los ceros del rial y cambiar el nombre de la moneda, algo que su pueblo viene haciendo desde hace mucho tiempo para simplificar las transacciones.
“El gabinete acordó hoy un proyecto de ley para eliminar cuatro ceros de la moneda y que el ‘tomán’ será nuestra moneda nacional”, dijo el portavoz del gobierno Ali Rabiei a los periodistas en Teherán.
El valor del rial iraní ha caído a mínimos históricos desde el año pasado.
Hace tres años la divisa cotizaba a 37.000 por dólar, pero el año pasado se desplomó a 180.000.
Eso fue después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que Estados Unidos se retiraría unilateralmente del acuerdo nuclear con Irán en 2015 y que volvería a imponer sanciones.
En ese momento, se veían largas colas fuera de las oficinas de cambio, antes de que el gobierno iraní tomara medidas drásticas al arrestar a los traficantes sin licencia y congelar las cuentas de los especuladores.
Actualmente el rial se comercia en la calle a unos 120.000 riales por dólar estadounidense, mientras que la tasa oficial es de 42.000.
Esto significa que cualquier persona que no tenga una tarjeta bancaria ha tenido que abandonar prácticamente las monedas y llevar en sus monederos o carteras gruesos fajos de billetes para hacer sus compras diarias.
En un intento de simplificar las transacciones, los iraníes se han referido a su moneda como el tomán y han cortado un cero – un sistema único que es una fuente de confusión para los visitantes extranjeros.
El Gobierno iraní lo ha reconocido con su última medida, que debe ser remitida al Parlamento para su aprobación final.
“Esto hará que la moneda nacional sea más efectiva”, dijo el portavoz Rabiei. “Estará más en línea con la práctica común en la sociedad…. el rial no se usa mucho”.
“Las monedas volverán a circular”, añadió.
El Fondo Monetario Internacional ha pronosticado que la economía de Irán se contraerá un 6.0 por ciento este año debido a las sanciones y a la creciente inestabilidad en Oriente Medio.