Un hombre suizo de 64 años, arrestado en Irán bajo sospecha de espionaje, fue encontrado muerto en su celda, según las autoridades iraníes, que aseguran que se quitó la vida. El portavoz judicial de Irán afirmó que el detenido había tomado fotografías de instalaciones militares.
El gobierno suizo solicitó explicaciones detalladas sobre los motivos del arresto y pidió una investigación exhaustiva sobre las circunstancias de la muerte del hombre, quien se encontraba en Irán como turista. Según el portavoz Asghar Jahangir, el individuo había ingresado en octubre desde la frontera afgana, en un vehículo con equipos técnicos.
El Departamento de Asuntos Exteriores de Suiza (DFAE) indicó que fue notificado por las autoridades iraníes el 10 de diciembre sobre la detención del hombre, acusado de espionaje. El DFAE señaló que el muerto, quien llevaba décadas viviendo en el sur de África, no residía en Suiza desde hace casi 20 años.

Jahangir explicó que el hombre fue detenido en una zona militar restringida de la provincia de Semnan, donde presuntamente tomaba fotografías para colaborar con países hostiles. Según el portavoz, el hombre apagó la luz de su celda, se colocó fuera del alcance de las cámaras y se ahorcó con un trozo de tela.
En Irán, varios extranjeros y personas con doble nacionalidad han sido arrestados en los últimos años, principalmente por cargos de espionaje y seguridad. Entre ellos se encuentran la pareja francesa Cécile Kohler y Jacques Paris, acusados de espionaje, y la periodista italiana Cecilia Sala, quien fue liberada y repatriada este mes tras su arresto en diciembre.

El año pasado, Omán negoció la liberación de seis europeos, incluido el belga Olivier Vandecasteele, condenado por espionaje y detenido durante más de un año. Grupos de derechos humanos acusan a Irán de utilizar estas detenciones para presionar a otros países, acusación que Teherán rechaza.