Los informes del fin de semana decían que Irán estaba aumentando su retórica contra cualquier tipo de pacto de defensa aérea respaldado por Estados Unidos que pudiera unir a Israel con varios países árabes. Ostensiblemente, esa cooperación sería defensiva, pero Irán y sus apoderados son la única amenaza real para la región en la actualidad.
Irán utiliza proxys para lanzar drones y misiles en toda la región, lo que incluye aterrorizar a la región kurda de Irak, utilizar drones en Siria para amenazar a Israel y a las fuerzas estadounidenses, basar drones en Yemen e Irak para amenazar al Golfo, y también amenazar a la navegación.
Irán ha estado al tanto de los informes de los medios de comunicación occidentales sobre esta posible cooperación. Sin embargo, las recientes declaraciones de Irán ofrecen los mismos ataques repetidos contra los “sionistas” que en el pasado. Irán parece haber aumentado la retórica en vísperas de la visita del presidente estadounidense Joe Biden. Las últimas amenazas implican que si se llega a un pacto y si éste “amenaza” a Irán, éste podría atacar a Estados Unidos u otros objetivos.
¿Se creará el concepto de un grupo de “Alianza de Defensa Aérea de Oriente Medio”? Esta es la terminología de la que han informado Reuters y otros medios de comunicación desde junio. El ministro de Defensa, Benny Gantz, ha respaldado este concepto. Los legisladores estadounidenses también quieren impulsar la ley “DEFEND”, que se supone que se basa en los Acuerdos de Abraham. Estados Unidos también quiere contrarrestar los drones iraníes.
De hecho, Israel y sus nuevos amigos del Golfo han mantenido muchas más reuniones en los últimos años. Gantz dijo recientemente que había habido 150 de esas reuniones y unos 3.000 millones de dólares en ventas de armas. Es una cifra importante. Sin embargo, la venta de armas y las reuniones no hacen necesariamente un pacto fuerte y queda por ver a qué conduce exactamente la visita de Biden.
La cancha de Irán
La cuestión devuelve entonces la pelota al tejado de Irán. Irán ha manifestado aquí y allá su oposición a cualquier tipo de agrupación defensiva. Irán es hostil a los Acuerdos de Abraham en general, por lo que no está claro cómo aumentarán las amenazas y acciones actuales de Irán y su oposición. Irán debe andarse con cuidado porque, si bien goza de cierta impunidad para llevar a cabo ataques en Siria e Irak, demasiadas acciones destinadas a desestabilizar el Golfo podrían dar lugar a la unión de los países contra Irán.
Una pista de cómo Irán tiene que andarse con cuidado puede verse en los informes del fin de semana de que la Royal Navy incautó armas que Irán estaba contrabandeando a través de lanchas rápidas en enero y febrero.
La Marina Real británica afirma que uno de sus buques de guerra se incautó de armas iraníes, incluidos misiles tierra-aire y motores para misiles de crucero, a contrabandistas en aguas internacionales al sur de Irán a principios de este año. Así pues, Irán actúa al margen de las normas del derecho internacional, pero se le sigue de cerca en su comportamiento.
Irán debe considerar, antes de actuar, cómo hará que Estados Unidos, Reino Unido, Francia y otros se unan contra las acciones de Irán. Además, dado que las conversaciones sobre el acuerdo con Irán continúan, Irán debe sopesar si quiere poner en peligro el posible acuerdo o utilizar sus amenazas para lograr un acuerdo. Empujar a los países de la región a formar una alianza defensiva provocando y escalando contra ellos podría perjudicar los intereses de Irán.
Por lo tanto, Irán debe tener en cuenta este círculo vicioso: cuanto más actúe para oponerse a un pacto defensivo, más razones dará para la formación de ese pacto. Pero si Irán no hace nada, los países que pretenden formar el pacto pueden sentir que no tienen oposición y seguir adelante de todos modos.