DAMASCO, Siria (AP) – Irán y Siria se comprometieron el domingo a dar “pasos poderosos” para hacer frente a las sanciones impuestas por Estados Unidos a los dos aliados regionales, y afirmaron que sus relaciones se fortalecerán bajo el nuevo liderazgo de Irán.
El anuncio lo hizo el nuevo ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, que fue recibido en el aeropuerto una visita a Damasco por su homólogo sirio, Faisal Mekdad.
Irán ha sido uno de los más firmes defensores del presidente sirio, Bashar Assad, y ha enviado miles de combatientes de toda la región para ayudar a sus tropas en el conflicto sirio, que dura ya 10 años y que ha causado medio millón de muertos y el desplazamiento de la mitad de la población del país, de 23 millones de personas, antes de la guerra.
Con la ayuda de Rusia e Irán, las fuerzas gubernamentales sirias controlan ahora gran parte de Siria. Pero el país lleva años sufriendo las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea.
Las sanciones del Tesoro de Estados Unidos se han dirigido a una red que abarca a Siria, Irán y Rusia, y que es responsable del envío de petróleo al gobierno sirio.
Las sanciones estadounidenses se impusieron a Teherán después de que el expresidente estadounidense Donald Trump sacó a Estados Unidos del acuerdo nuclear entre Irán y las potencias mundiales en 2018.
Las sanciones han causado una grave escasez de combustible en Siria, que ha estado dependiendo principalmente de los envíos de petróleo iraní que han sido objeto de misteriosos ataques en los últimos dos años. Siria ha culpado a Israel de los ataques.
“Los dirigentes de los dos países tomarán juntos medidas poderosas para hacer frente al terrorismo económico y reducir la presión sobre nuestros pueblos”, dijo Amir-Abdollahian en el aeropuerto. No dijo cómo combatirán los dos países las sanciones.
La visita de Amir-Abdollahian a Siria se produce un día después de que representara a Irán en una conferencia a la que asistieron funcionarios de todo Oriente Medio con el objetivo de aliviar las tensiones regionales.
Amir-Abdollahian describió a Siria como la “tierra de la resistencia”, y añadió que Damasco y Teherán habían trabajado juntos “sobre el terreno y logrado victorias conjuntas”.