El jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) de Irán afirmó haber probado con éxito un “nuevo misil” en medio de las crecientes tensiones con Estados Unidos y la ruptura del acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales.
La agencia de noticias semioficial Tasnim, que está cerca del CGRI, dijo que el general Hossein Salami le dijo a un grupo de clérigos el sábado sobre la prueba de misiles un día antes.
Lo llamó “uno de los días exitosos de la nación”, pero no dio más detalles sobre el arma ni sobre la prueba en sí.
El jueves, el presidente iraní Hassan Rouhani presentó oficialmente un sistema de misiles de defensa aérea fabricado en Irán, el Bavar-373.
Durante la presentación del Bavar-373, Rouhani dio un tono beligerante a las negociaciones con Estados Unidos, diciendo que “las conversaciones son inútiles” a medida que el acuerdo nuclear de Teherán con las potencias mundiales se desmorona aún más.
“Ahora que nuestros enemigos no aceptan la lógica, no podemos responder con lógica”, dijo en el discurso televisado.
Desde 1992, Irán ha desarrollado una industria de defensa nacional que ha producido armas ligeras y pesadas que van desde morteros y torpedos hasta tanques y submarinos.
Estados Unidos volvió a imponer sanciones a Irán después de que la administración Trump se retirara del acuerdo nuclear el año pasado por las preocupaciones sobre el programa de misiles de Irán y la influencia regional.
El presidente de Estados Unidos Donald Trump argumentó que el acuerdo no limitaba el programa de misiles balísticos de Irán.
A principios de este mes, Irán reveló tres nuevos misiles guiados con precisión, con su ministro de defensa diciendo que demuestran que el país está listo para defenderse frente a la “maldad y conspiraciones” de Estados Unidos.
La nueva línea de misiles aire-aire apodados “Yasin”, “Balaban” y una nueva serie de “Ghaem” fueron desarrollados conjuntamente por el ministerio y Sa Iran, también conocido como Iran Electronics Industries.
Fueron reveladas en medio de las tensiones entre Irán y Estados Unidos y sus aliados en el Estrecho de Ormuz, un corredor vital que une a los países productores de petróleo de Oriente Medio con los mercados de Asia, Europa y Norteamérica.
El mes pasado, se dijo que Irán había probado el Shahab-3, un misil balístico de mediano alcance que se cree ampliamente que es capaz de lanzar una ojiva nuclear.
Irán ha mantenido que su programa de misiles es solo para fines de defensa y ha rechazado las negociaciones sobre el mismo.