Israel seguirá su estrategia para combatir la agresión iraní independientemente de que las potencias mundiales lleguen a un acuerdo con la República Islámica en las negociaciones de Viena, dijo el primer ministro Naftali Bennett en una entrevista con The Jerusalem Post esta semana que aparece íntegramente en la página 13.
“La estrategia israelí no depende de si hay un acuerdo o no”, declaró Bennett. “Nos protegeremos por nosotros mismos. Incluso si hay un acuerdo, no estamos comprometidos con él. Preservaremos nuestra libertad de acción”.
Bennett habló mientras continúan las conversaciones con Irán para volver al Plan de Acción Integral Conjunto de 2015. “Nosotros y los estadounidenses no coincidimos en todo”, dijo Bennett, pronunciándose en contra de suavizar las sanciones a Irán.
“Un acuerdo que enviará decenas de miles de millones de dólares a este régimen podrido y débil será un error, porque este dinero se destinará al terror contra los soldados de las FDI y los estadounidenses en la región”, declaró Bennett. “Cuando el dinero entra en las arcas iraníes, atacan a los soldados estadounidenses… a través de sus apoderados”.
Irán está muy debilitado, con su moneda agotada, regiones del país carentes de agua, y se están produciendo grandes manifestaciones contra el gobierno. Teherán, dijo Bennett, “está jugando al póquer con una mano muy débil, pero van de farol”.
Israel ha transmitido el mensaje a sus amigos de Estados Unidos y Europa que negocian con Irán de que el régimen de los mulás no debe recibir “un viento de cola de dinero”, dijo el primer ministro.
“Lo último que se hace a un Estado terrorista como éste es darle decenas de miles de millones de dólares”, declaró Bennett. “Hay que hacer lo contrario: hay que debilitarlos, ponerles a elegir entre la continuación de la búsqueda de armas nucleares o el propio régimen”.
Una parte de la estrategia de Bennett es “mantener a Irán significativamente lejos del estallido nuclear para siempre”.
El primer ministro repitió su comparación de Irán con un pulpo, cuya cabeza está en Teherán y cuyos tentáculos que rodean a Israel son Hezbolá en Líbano, las milicias en la frontera de Israel con Siria y la Yihad Islámica Palestina y, en menor medida, Hamás en Gaza.
En el pasado, dijo, “Israel cayó en la trampa y luchó tácticamente contra los tentáculos del pulpo. Pero el pulpo en sí es Irán. Mi doctrina establece que en esta guerra fría entre Irán e Israel, no permitiré que sea unilateral. Quiero debilitarlos y dañar sus fuerzas en todas las dimensiones. No tienen nada que hacer en nuestra región, a 1.000 kilómetros de casa. No quiero ver a Irán en Siria ni en ninguna frontera nuestra”.