La agencia de noticias iraní “Fars News” está rastreando cinco petroleros iraníes que se dirigen a Venezuela. Los EE.UU. dijeron que considerarán medidas para evitar el suministro de gasolina iraní al régimen del dictador Nicolás Maduro en Caracas. Irán y Caracas son aliados. Turquía y Rusia también apoyan a Maduro.
Irán está orgulloso de que su flota de petroleros cruce los mares. Fortune, Petonia y Forest han cruzado el Estrecho de Gibraltar en las últimas 24 horas, y se estima que Fortune está a una semana de Caracas.
Las autoridades iraníes no han confirmado que los petroleros se dirijan a Venezuela o que tengan combustible a bordo. Sin embargo, los medios iraníes, confiando en fuentes occidentales, admiten que los petroleros van a Venezuela.
Caracas pagó a Irán en oro para que le suministrara el combustible que tanto necesitaba. La economía venezolana está en medio de una crisis.
Maduro recientemente sorprendió a un grupo de mercenarios y disidentes venezolanos al capturar a dos americanos en una incursión mal planeada que avergonzó a Washington.
Irán ha aprovechado la oportunidad para aumentar la controversia metiendo sus petroleros en lo que podría ser una pantalla naval de EE.UU. América ha guiado destructores de misiles que podrían interceptar a los iraníes.
Pero eso llevaría a una grave crisis, y el CGRI ha amenazado con represalias. Irán está tirando los dados con todos sus petroleros hacia Sudamérica.