La administración Trump ha buscado por mucho tiempo resaltar la amenaza del programa de misiles balísticos de Irán y también convertirlo en el centro de las preocupaciones sobre el programa nuclear de Irán y las violaciones de Teherán del acuerdo de 2015 con Irán.
Ahora EE.UU. está poniendo en marcha medidas radicales para hacer frente al programa nuclear iraní, después de que el Secretario de Estado de los EE.UU. dijera que el restablecimiento de las sanciones ya estaba en marcha. Esto ha sido visto como un movimiento unilateral de los EE.UU. y los Estados extranjeros han indicado que están en contra. El núcleo de las sanciones son los misiles y las armas convencionales de Irán.
Una hoja informativa del Departamento de Estado de EE.UU. que se distribuyó el lunes destaca los elementos clave del plan de juego de la Casa Blanca. El objetivo es contrarrestar a “las personas iraníes que apoyan los programas de misiles balísticos de Irán y que han sido asociados con una organización iraní que ha jugado un papel clave en la cooperación de misiles entre Irán y Corea del Norte”. La hoja informativa encaja con el informe de Reuters de ayer que incluía citas de un alto funcionario estadounidense sin nombre que afirmaba que Irán y Corea del Norte estaban renovando la cooperación en materia de misiles.
Irán tiene un impresionante arsenal de misiles, como su serie de misiles Shahed, Qiam y Zulfighar. Sin embargo, Corea del Norte también es una potencia técnica en materia de misiles. Ambos países han construido sobre la tecnología soviética y china. Los misiles no son, en esencia, dramáticamente más avanzados en concepto desde la era de los V-2 alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, el objetivo es aumentar el alcance y la precisión y también trabajar con cohetes de combustible sólido y líquido. Irán ha logrado hacer esto a pesar de las sanciones de EE.UU. e Irán afirma que su programa no viola las sanciones anteriores o el Acuerdo con Irán.
El mensaje de Irán a los EE.UU. en respuesta es que los EE.UU. está en desorden y no será capaz de poner en marcha estas sanciones. El Ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Javad Zarif, apeló personalmente al Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para que controle a Pompeo y no ponga en ridículo a los Estados Unidos. Irán cuenta con Rusia y China para que le den la razón en la ONU y mantengan las sanciones de EE.UU. débiles.
Irán cree que ha sido más astuto que los americanos y casi se atreve a que la administración Trump “lo provoque” con las sanciones, para demostrar que no morderán el anzuelo. Los líderes supremos de Irán y otros funcionarios del régimen se jactaron esta semana de cómo los anteriores invasores de Irán han sufrido gravemente. En resumen, el régimen está diciendo que seguirá haciendo lo que quiera, independientemente del enfoque láser de EE.UU. en los misiles balísticos y el programa nuclear y la cooperación de Corea del Norte.