El presidente de Irán, Hassan Rouhani, dijo el sábado que esperaba que la próxima administración estadounidense hubiera “aprendido” que las sanciones no pueden hacer que Teherán se incline ante la política estadounidense.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, que parece haber perdido las elecciones presidenciales de 2020 frente a su contrincante Joe Biden, ha aplicado una política de “máxima presión” y de sanciones contra Irán desde su retirada en 2018 del acuerdo nuclear con Irán.
“Esperamos que la experiencia de tres años sea una lección para que la próxima administración de Estados Unidos cumpla con las leyes y reglamentos y vuelva a sus compromisos”, dijo Rouhani en un discurso televisado.
“Nuestro pueblo se ha enfrentado al terrorismo económico durante los últimos tres años y ha mostrado una resistencia y una paciencia sin precedentes”.
Rouhani dijo que Irán “continuará su resistencia y paciencia hasta que la otra parte se incline ante las leyes y regulaciones”.
La república islámica esperaba que “los que imponen las sanciones se den cuenta de que su camino está equivocado y que no lograrán sus objetivos de ninguna manera”.
Los funcionarios iraníes han dicho que se centrarán en las políticas de la próxima administración de EE.UU. en lugar de en quién se convierte en presidente.
Teherán también ha subrayado que un posible retorno de EE.UU. al acuerdo nuclear tendría que ir acompañado de una compensación por los daños causados por la retirada y una “garantía” de que no se repetirá.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, dijo el martes que las elecciones estadounidenses no tendrían “ningún efecto” en las políticas de Teherán hacia Washington.
Biden ha dicho que planea embarcarse en un “camino creíble para volver a la diplomacia” con Irán si gana la presidencia y planteó la posibilidad de volver al acuerdo nuclear de 2015, negociado cuando era vicepresidente bajo Barack Obama.