El presidente iraní Hassan Rouhani dijo el miércoles que Irán estaba “muy contento” por la inminente salida del cargo de su homólogo estadounidense Donald Trump, quien lideró una campaña de “máxima presión” contra la República Islámica.
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, que vencer a Trump en las urnas en noviembre, ha señalado que está dispuesto a volver a negociar con Irán para restablecer el acuerdo nuclear.
“Algunos dicen que estamos sobreexcitados por la llegada del Sr. Biden. No, no lo estamos, pero estamos muy contentos de ver que Trump se va”, dijo en comentarios televisados en una reunión de gabinete.
“Gracias a Alah, estos son sus últimos días”, añadió Rouhani, llamando a Trump un “tirano”, “el presidente más rebelde y anárquico” y un “terrorista y asesino”.
El colegio electoral confirmó a Biden como el próximo presidente de los EE.UU. el lunes, incluso cuando el titular sigue negándose a aceptar la derrota.
La entrega formal del poder tendrá lugar el 20 de enero cuando Biden preste juramento.
Las tensiones entre Teherán y Washington se dispararon durante la presidencia de Trump, mientras su administración buscaba acercar a Israel y a los Estados árabes del Golfo con una línea dura contra Irán.
En 2018, Trump sacó a Washington del acuerdo nuclear histórico con Teherán y volvió a imponer sanciones unilaterales.
En enero de este año, Trump ordenó un ataque aéreo cerca del aeropuerto de Bagdad que mató al general iraní de mayor rango Qassem Soleimani y provocó ataques iraníes de represalia contra las tropas estadounidenses en Irak.
Trump “nos crea obstáculos para la compra de vacunas [COVID-19], [es decir] lo mucho que esta persona está desprovista de todos los principios éticos y humanos”, dijo Rouhani.
Desde la victoria de Biden, el gobierno de Rouhani ha señalado repetidamente su apertura a la nueva administración estadounidense, aunque el líder supremo de Irán ha advertido contra las esperanzas de una apertura con Occidente.
Rouhani dijo que el resultado de las elecciones en Estados Unidos mostraba el deseo del pueblo estadounidense de tener un presidente “respetuoso de la ley” y pidió al gobierno de Biden que estuviera a la altura de las expectativas.
“Si quiere estar en el camino correcto, está ahí, y si quiere el equivocado, también está ahí”, dijo.