Un general del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica habría sobrevivido a un atentado mortal que causó la muerte de su guardaespaldas, según informó el sábado la televisión estatal iraní.
El general de brigada Hossein Almassi, comandante de la guardia en la conflictiva provincia de Sistán-Baluchistán, viajaba en un coche cerca de un puesto de control en la capital de la provincia, Zahedan, cuando fue atacado por militantes, informó el sábado Reuters, citando a la televisión iraní.
El general no resultó herido, según el informe.
El guardaespaldas asesinado fue identificado como Mahmoud Awessalom, hijo de un alto comandante del CGRI en la región, según la Agencia de Noticias de la República Islámica (IRNA).
Las autoridades detuvieron a algunos de los sospechosos, pero no los identificaron, según el informe.
Sistán-Baluchistán ha sido escenario de enfrentamientos ocasionales entre las fuerzas iraníes y diversos grupos militantes. Las relaciones entre los residentes de la región, predominantemente suníes, y la teocracia chiíta de Irán son tensas desde hace tiempo.
La provincia, fronteriza con Pakistán y Afganistán, es la base de un grupo separatista suní vinculado a Al Qaeda y conocido como Jaish al-Adl o Ejército de la Justicia.
Las fuerzas de seguridad también se han enfrentado a los narcotraficantes en la provincia, situada en la principal ruta afgana de contrabando de opio y heroína.
En enero, las fuerzas del CGRI dijeron que habían matado a un militante no identificado que atacó su oficina de inteligencia en la ciudad de Saravan, en Sistán-Baluchistán, a unos 1.360 kilómetros (850 millas) al sureste de la capital, Teherán.
A finales de diciembre, el CGRI dijo que había matado a seis “bandidos armados” en un tiroteo en la región que también dejó a tres de sus miembros muertos.
El CGRI es una organización terrorista reconocida por Estados Unidos.