El lunes pasado, en una audiencia cerrada de la Corte Suprema que se llevó a cabo ante los jueces Hanan Meltzer y Neal Hendel, encabezados por la jueza suprema de Justicia Esther Hayut, se conversó sobre el uso de detectores de metal para visitantes judíos en el Monte del Templo pero no para visitantes árabes.
Durante la audiencia, el estado presentó a los jueces información secreta de inteligencia de la policía según la cual existe una justificación para examinar solo a judíos en la entrada al Monte del Templo.
El estado respondió a una petición de la organización derechista Otzmah Yehudit y al abogado Itamar Ben-Gvir, alegando que el uso de magnetómetros contra visitantes judíos constituía discriminación.
La petición se basó en una decisión anterior de la Corte Suprema de que la policía no podía compilar listas de solamente visitantes judíos al Monte del Templo.
El presidente de la Corte Suprema, Hayut, anunció que no se realizarán más audiencias sobre el asunto.