El ministro de Seguridad Interior, Omer Berlev, ha accedido a la petición de Jordania de que se le permita aumentar el personal del Waqf, responsable de la administración diaria del Monte del Templo, informó el lunes la emisora pública Kan.
El informe, que no tiene fuentes, afirma que la policía apoya la medida y que Barlev, a su vez, quiere contar con varios miembros del Waqf, que apoyan al grupo terrorista Hamás.
Jordania, que gobernó Cisjordania y el Este de Jerusalén desde 1948 hasta la Guerra de los Seis Días de 1967, mantiene desde hace tiempo que sus tratados con Israel le otorgan la custodia de los lugares sagrados cristianos y musulmanes de Jerusalén; aunque Israel nunca ha aceptado esta reivindicación, concede la administración diaria del Monte del Templo al Waqf, financiado por Jordania.
El Monte del Templo, conocido por los musulmanes como Haram al-Sharif o complejo de Al-Aqsa, es históricamente el lugar más sagrado del judaísmo, y el tercero del Islam, con base en una leyenda.
Durante mucho tiempo ha sido un foco de violencia palestina, y las tensiones han vuelto a aumentar en las últimas semanas con disturbios palestinos, ataques a la policía israelí e intentos de judíos de rezar en el Monte del Templo.
Cualquier cambio en el antiguo statu quo del Monte puede provocar violencia.
Según el informe de Kan, Jordania hizo la petición en marzo, antes de la última ronda de violencia palestina. Israel aprobó parcialmente la medida entonces, permitiendo el empleo de 15 personas más. Ahora Jordania exige que el número se eleve a 50.
Aunque Barlev ha accedido a la petición, aún no ha sido aprobada oficialmente por el gobierno.
Una fuente gubernamental dijo a Kan que “la política del gobierno de Israel es preservar el statu quo en el Monte del Templo bajo la soberanía israelí y mediante la coordinación con otros actores”.
El funcionario dijo que esta política fue acordada por todos los miembros del gobierno. “En este momento no se está considerando ninguna propuesta para cambiar el statu quo”.
El rey de Jordania, Abdullah II, que se encuentra de viaje en Estados Unidos, donde se espera que se reúna con el presidente estadounidense, Joe Biden, para tratar las tensiones en torno al lugar sagrado, abordó este asunto el lunes en una reunión con figuras religiosas en Nueva York, según un comunicado de la corte real.
“El Rey reiteró que la Custodia Hachemita de los lugares sagrados islámicos y cristianos en Jerusalén es un honor y una responsabilidad que ayuda a preservar la unidad de todas las iglesias y, lo que es más importante, la unidad entre las comunidades musulmanas y cristianas”, dice el comunicado.
“El Rey reafirmó el compromiso de Jordania con los principios de armonía y diálogo interreligiosos, así como con la moderación y la apertura, subrayando la promoción de la paz y la estabilidad como pilares de la política exterior de Jordania”.
Las tensiones en el lugar sagrado han repercutido en atentados terroristas, presiones con los aliados de Israel, amenazas de Hamás y la exacerbación de la actual crisis de la coalición.
Los enfrentamientos también han provocado una escalada de tensiones diplomáticas entre Israel y Jordania.
Abdullah ha condenado a Israel por los enfrentamientos, criticando al Estado por permitir la entrada de peregrinos judíos en el lugar y pidiendo al gobierno israelí que respete “el statu quo histórico y legal” del lugar, según una reciente declaración de la Corte Real Hachemita.