BAGDAD (AP) – Al menos cuatro cohetes apuntaron el jueves a la Embajada de Estados Unidos en la fuertemente fortificada Zona Verde de Bagdad, según informaron dos funcionarios de seguridad iraquíes. La zona alberga misiones diplomáticas y la sede del gobierno iraquí.
Tres de los misiles impactaron dentro del perímetro de la embajada estadounidense, dijeron los funcionarios. Otro impactó en una escuela situada en un complejo residencial cercano. Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar con los medios de comunicación.
Un comunicado militar iraquí dijo que una niña y una mujer resultaron heridas en el ataque, sin dar más detalles. El comunicado dijo que los cohetes habían sido lanzados desde el barrio de Dora, en Bagdad.
Los testigos dijeron que escucharon el sistema de defensa C-RAM de la embajada -que se supone que detecta y destruye los cohetes, la artillería y los proyectiles de mortero entrantes- durante el ataque.
El ataque es el último de una serie de ataques con cohetes y drones que han tenido como objetivo la presencia estadounidense en Irak desde principios de año, tras el segundo aniversario del ataque estadounidense que mató al general iraní Qassem Soleimani y al comandante de la milicia iraquí Abu Mahdi al-Muhandis.
El jueves pasado, una serie de atentados tuvo como objetivo a las tropas estadounidenses en Irak y Siria. Los cohetes alcanzaron una base militar iraquí que albergaba tropas estadounidenses en la provincia occidental de Anbar y en la capital.
Las facciones chiíes proiraníes de Irak han prometido vengarse del asesinato de Soleimani y han condicionado el fin de los ataques a la salida total de las tropas estadounidenses del país.
La coalición liderada por Estados Unidos finalizó formalmente el mes pasado su misión de combate de apoyo a las fuerzas iraquíes en la actual lucha contra el grupo Estado Islámico. Unos 2.500 soldados permanecerán mientras la coalición pasa a una misión de asesoramiento para seguir apoyando a las fuerzas iraquíes.
El máximo comandante de Estados Unidos para Oriente Medio, el general de la Marina Frank McKenzie, advirtió en una entrevista con The Associated Press el mes pasado que se espera que aumenten los ataques contra el personal estadounidense e iraquí por parte de las milicias respaldadas por Irán, decididas a sacar a las fuerzas estadounidenses.