El principal político musulmán suní del Líbano, el ex primer ministro Saad al-Hariri, pidió la restauración de un plan francés para sacar a la nación de su peor crisis financiera desde la guerra civil.
“Hay tres proyectos en el país: el de Hezbolá y el Movimiento Amal, que está vinculado a fuerzas extranjeras, otro que quiere sacar al Líbano de esta crisis y trabaja según el principio de ‘el Líbano primero’, y un tercero para los sobrepujadores que han llevado al país a su estado actual”, dijo Hariri en una entrevista televisiva a finales del jueves.
Cuando se le preguntó sobre su nominación para el gabinete de los partidos chiítas, dijo: “Hezbolá y el Movimiento Amal insisten en nominar a Saad Hariri solo para evitar las tensiones sunitas-chiítas”.
Añadiendo que, “Soy candidato a PM porque represento a un bloque parlamentario y no porque alguien quiera que esté en este puesto”.
En cuanto a la crisis económica, el ex primer ministro continuó, “Hezbolá es la causa de los problemas en el Líbano desde que los Estados Unidos le impusieron sanciones”, declaró, “Si el partido chiíta se interesa por el Líbano, es necesario hacer sacrificios”.
La crisis financiera del Líbano ha hundido la moneda hasta en un 80% desde octubre, bloqueó los depósitos de los ahorradores en un sistema bancario paralizado y alimentó la pobreza y el desempleo.
“Hay partes que sacuden la relación del Líbano con los Estados Árabes”, dijo Hariri en referencia a la intervención de Hezbolá en Siria, Irak y Yemen.