El Hezbolá libanés y el Has’d al-Shaabi iraquí han sido vistos ayudando a las fuerzas Basiji de Irán a reprimir a los manifestantes en todo el país.
Según las fuentes, se ha visto a hombres de paisano con acento libanés intentando reprimir los disturbios en varias ciudades de Irán, incluida la capital, Teherán. Se suman a los cientos de efectivos de la policía, los Basiji y el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria iraní que han sido fundamentales para intentar sofocar las protestas.
Irán está inmerso en protestas generalizadas contra el régimen desde mediados de septiembre, después de que Mahsa Amini, de 22 años, muriera bajo custodia policial tras ser detenida por la policía de la moral del país por no llevar correctamente el hiyab.
Hezbolá en las protestas de Irán
A principios de octubre, el secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah, se refirió a la muerte de Amini como un “incidente impreciso” y a que las protestas que sacuden el país no reflejan la verdadera voluntad de los iraníes.
“El Estado iraní es un objetivo y por eso se explota cualquier incidente… para incitar contra este Estado”, dijo. “Este vago incidente fue explotado y la gente salió a la calle”.
Protestas en curso en Irán
Aunque no está claro cuántos manifestantes han muerto desde que estalló la protesta, se cree que han muerto más de 200 personas. Los vídeos y las imágenes que aparecen en las redes sociales muestran a las fuerzas de seguridad disparando con fuego real contra la multitud y golpeando violentamente a los manifestantes.
Según la organización de Derechos Humanos de Irán, con sede en Oslo, unas 20 personas muertas eran menores de edad.
En las protestas también han muerto varios miembros de las fuerzas Basiji y decenas más han resultado heridos.
Uso de apoderados en el pasado en Irán
Aunque es poco frecuente, Irán utilizó a Hezbolá y a otros apoderados de habla árabe para ayudar a sofocar las protestas.
Según un informe de la BBC Persa, durante las protestas de 2009 se vio a policías antidisturbios y agentes de paisano con acento árabe reprimiendo a los iraníes que se manifestaban contra los resultados de las elecciones presidenciales.
Según el informe, se cree que los hombres pertenecen a Hezbolá o a grupos terroristas palestinos como Hamás. Ambos grupos dependen en gran medida de Teherán para su financiación y armamento.
A pesar de las dificultades económicas a las que se enfrentan sus propios ciudadanos, Irán envía más de 1.000 millones de dólares estadounidenses a sus grupos interpuestos, incluidos más de 500 millones de dólares a Hezbolá en Líbano, cientos de millones a los houthis en Yemen, más de 100 millones de dólares a Hamás y a la Yihad Islámica Palestina en Gaza y decenas de millones de dólares a las milicias proiraníes en Irak.