Reacciones en Libia se han vinculado más a preocupaciones locales que al encuentro de los ministros de exteriores de Israel y Libia.
El contexto político detrás de las protestas
Anas El Gomati, director del Instituto Sadeq en Trípoli, expresó que la reacción proviene del “frustración de los libios al ser mantenidos en la oscuridad respecto a políticas clandestinas y encuentros secretos”.
Libia, cuyas elecciones presidenciales han sido postergadas desde 2018, enfrenta tensiones entre sus legislaturas rivales. El primer ministro interino, Abdul Hamid Dbeibeh, muestra intenciones de permanecer en el poder.
El último suceso diplomático ocurrió cuando el ministro de Relaciones Exteriores, Eli Cohen, confirmó su encuentro con la ministra de exteriores libia, Najla Mangoush. Horas después, Dbeibeh suspendió a Mangoush.
Reacción local ante la política internacional
Para El Gomati, estos eventos se interpretan más como asuntos internos que externos. En julio de 2022, manifestantes expresaron su descontento hacia la administración quemando una parte de la Cámara de Representantes en Tobruk.
Joshua Krasna, director del Centro para Políticas Emergentes de Energía en Medio Oriente, destacó la falta de legitimidad internacional del actual gobierno libio y su escasa representatividad.
El Gomati mencionó conexiones con los Acuerdos de Abraham que Israel firmó con socios árabes, sugiriendo que Libia busca usar la idea de normalización a su favor.
Historia de interacciones entre Libia e Israel
A pesar de las recientes controversias, ha habido interacciones entre líderes libios e israelíes durante años. En enero del año pasado, Dbeibeh se reunió con el director del Mossad, David Barnea, en Jordania.
En 2020, un alto oficial libio solicitó el apoyo de Israel en una entrevista. Abdul Salam al-Badri expresó el deseo de fortalecer las relaciones entre ambos países.
El país africano ha enfrentado inestabilidad desde 2011, con diferentes administraciones rivalizando el poder. Según informes, Israel apoya parcialmente al régimen de Haftar, aunque en menor medida que otros aliados regionales como Egipto y Emiratos Árabes Unidos.
La relación pasada de Libia con Israel
El antiguo dictador libio, Muammar Gaddafi, tuvo una relación complicada con Israel, apoyando en ocasiones a grupos terroristas palestinos. Sin embargo, buscó la ayuda de Israel durante el levantamiento de 2011.
El Gomati resaltó la hipocresía de los líderes libios al culpar a Mangoush de las recientes tensiones, ya que las reuniones entre los dos países han sido una constante.