Arabia Saudita dijo el sábado por la noche que los ataques con aviones teledirigidos en sus principales instalaciones petroleras, uno de los centros de producción de energía más grandes e importantes del mundo, han interrumpido cerca de la mitad de la capacidad petrolera del reino, o el 5% del suministro mundial diario de petróleo.
El ministro de Energía de Arabia Saudita, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo en un comunicado citado por CNN que 5,7 millones de barriles diarios de petróleo crudo y gas se han visto afectados. Las últimas cifras de la OPEP de agosto de 2019 sitúan la producción total saudí en 9,8 millones de barriles por día.
El ministro de energía dijo que la “empresa está trabajando actualmente para recuperar las cantidades perdidas” de petróleo y que actualizará al público en los próximos dos días.
“Estos ataques no solo están dirigidos contra las instalaciones vitales del reino, sino también contra el suministro mundial de petróleo y su seguridad, y por lo tanto representan una amenaza para la economía mundial”, añadió.
El Ministerio del Interior saudita ha confirmado que los ataques con aviones teledirigidos provocaron incendios en las dos instalaciones. En un comunicado publicado en Twitter, el ministerio dijo que los incendios estaban bajo control y que las autoridades estaban investigando.
Los rebeldes hutíes de Yemen asumieron la responsabilidad de los ataques, diciendo que 10 aviones no tripulados atacaron las instalaciones petroleras de propiedad estatal de Saudi Aramco en Abqaiq y Khurais, según la agencia de noticias Houthi Al-Masirah.
Anteriormente, el sábado, el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, culpó a Irán por el ataque a las instalaciones petroleras saudíes.
“Teherán está detrás de casi 100 ataques contra Arabia Saudí, mientras que Rouhani y Zarif pretenden participar en la diplomacia”, declaró Pompeo en Twitter. “En medio de todos los llamamientos para que se reduzca la tensión, Irán ha lanzado un ataque sin precedentes contra el suministro de energía del mundo. No hay pruebas de que los ataques vinieran de Yemen”.
“Hacemos un llamamiento a todas las naciones para que condenen pública e inequívocamente los ataques de Irán. Estados Unidos trabajará con nuestros socios y aliados para asegurar que los mercados de energía permanezcan bien abastecidos y que Irán sea responsable de su agresión”, agregó.
Durante mucho tiempo se ha creído que Irán está planeando utilizar a los hutís para apoderarse de Yemen y tomar el puerto estratégico clave de Adén, que controla la entrada al Mar Rojo y, en última instancia, a la ciudad turística israelí de Eilat.
Irán ha negado durante mucho tiempo que respalde a los hutís y también ha negado las acusaciones saudíes de que Teherán proporcionó capacidades balísticas a los rebeldes hutíes en Yemen.