Los buques de la clase Viana do Castelo se sumarán a la flota existente con capacidades avanzadas y operación de drones.
Portugal se prepara para fortalecer su capacidad naval con la adquisición de seis modernos patrulleros de altura (OPV) de la clase Viana do Castelo, según un contrato adjudicado por la Dirección General de Recursos de Defensa Nacional del Ministerio de Defensa Nacional portugués. Está previsto que estos buques sean entregados entre 2027 y 2030 y complementarán a los cuatro OPV ya en servicio de la misma clase desde 2011 hasta 2018.
La clase Viana do Castelo representa un ambicioso proyecto de la Marina portuguesa, denominado NPO2000 (Navios de Patrulha Oceânica), diseñado específicamente para operar en las aguas del Océano Atlántico Norte. Estas embarcaciones destacan por su capacidad para operar vehículos de superficie no tripulados (USV), vehículos aéreos no tripulados (UAV), vehículos submarinos no tripulados (UUV), un helicóptero y dos lanchas neumáticas de casco rígido (RHIB). Además, cuentan con la capacidad de desplegar contenedores de misión y equipos de lucha contra la contaminación.
Dos de los buques de la clase Viana do Castelo, de la versión Navios de Combate à Poluição (NCP), estarán equipados con sistemas anticontaminación, incluyendo sistemas de Recuperación Rápida de Petróleo, contribuyendo así a la protección del medio ambiente marino.
Estos modernos buques, nombrados en honor a ciudades costeras portuguesas, forman parte de un plan de expansión y modernización de la flota naval. El primero de ellos, el NRP Viana do Castelo (P360), se unió a la flota en marzo de 2010. Desde entonces, Portugal ha anunciado la construcción de seis buques adicionales de la misma clase en los años 2016, 2017 y 2018.
Este ambicioso proyecto continuó con un pedido adicional de seis buques de la clase Viana do Castelo en junio de 2018, con un costo de 60 millones de euros cada uno, sumando un total de 500 millones de euros, junto con un buque multiuso. El pedido se finalizó en mayo de 2021, consolidando la expansión de la flota de la Marina portuguesa.
Estos buques están diseñados para operar con sistemas automatizados y cuentan con avanzadas capacidades de vigilancia y observación naval, además de capacidad para albergar un helicóptero ligero Super Lynx MK95. La modernización continua de la clase Viana do Castelo tiene como objetivo eliminar la obsolescencia y añadir capacidades para futuras operaciones, incluyendo la integración de sistemas modulares de apoyo a la misión, autoprotección, vigilancia y guerra antisubmarina (ASW).
Además, estos buques se están adaptando progresivamente para operar vehículos aéreos no tripulados (UAV) de despegue y aterrizaje vertical (VTOL), brindando así capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) avanzadas.