Australia ha rechazado la adquisición de los bombarderos furtivos B-21 Raider de Estados Unidos, a pesar de que había considerado esta opción como una forma de aumentar su capacidad de ataque de largo alcance.
Los analistas de defensa del principal think tank del país, el Instituto Australiano de Política Estratégica (ASPI), habían estudiado la posibilidad de que el B-21 pudiera servir a Australia, pero finalmente el gobierno australiano ha optado por no adquirirlos.
B-21 Raider: un bombardero furtivo de nueva generación
El B-21 Raider es un bombardero furtivo de nueva generación desarrollado por Estados Unidos que ha sido diseñado para penetrar en el espacio aéreo enemigo sin ser detectado.
La posibilidad de que Australia adquiriera este avión había sido considerada en la Revisión de la Política de Defensa del país, en la que se analizan las opciones de capacidad de defensa y se asigna el presupuesto de defensa.
Australia elige cazas furtivos F-35A
A pesar de que el B-21 Raider había sido considerado como una opción potencial, el gobierno australiano ha decidido no adquirirlo. En su lugar, ha optado por adquirir más cazas furtivos F-35A.
Según el informe de la Revisión de la Política de Defensa, esta decisión se debe a las circunstancias estratégicas de Australia y al enfoque de su estrategia de defensa y desarrollo de capacidades.
La importancia de la defensa en un mundo cambiante
En un mundo en el que China está mostrando su poderío, la defensa se convierte en un tema cada vez más importante para los países de la región del Pacífico. La Revisión de la Política de Defensa de Australia es un documento crítico que analiza las opciones de capacidad de defensa del país y asigna el presupuesto de defensa en consecuencia.
La decisión de no adquirir los bombarderos furtivos B-21 Raider demuestra la importancia de considerar cuidadosamente las opciones y de elegir las capacidades de defensa que mejor se adapten a las circunstancias estratégicas de cada país.
Conclusiones
En conclusión, Australia ha rechazado la adquisición de los bombarderos furtivos B-21 Raider de Estados Unidos y ha optado por adquirir más cazas furtivos F-35A en su lugar. La decisión se debe a las circunstancias estratégicas del país y al enfoque de su estrategia de defensa y desarrollo de capacidades.
La importancia de la defensa en un mundo cambiante se hace cada vez más evidente y la Revisión de la Política de Defensa de Australia es un documento crítico que analiza las opciones de capacidad de defensa del país y asigna el presupuesto de defensa en consecuencia.