La Marina Real Australiana (RAN) adquiere el avanzado sistema de sonares estadounidenses SURTASS-E, destinado a detectar submarinos enemigos, una inversión de 206 millones de dólares en la creciente tensión en la región del Pacífico.
Australia y los submarinos enemigos
El sistema SURTASS-E, provisto por EE. UU., será utilizado en los “buques de oportunidad” (VOO) de Australia, naves civiles y comerciales que, en tiempos de crisis, pueden ser movilizadas para detectar submarinos enemigos navegando en aguas oceánicas. Estos buques forman parte del programa Ships of Opportunity (SOOP) en Australia, que actualmente se enfoca en la recolección de datos oceanográficos.
Con SURTASS-E, los buques civiles australianos se transforman en potentes herramientas de inteligencia, capaces de rastrear submarinos alrededor de Australia y transmitir datos anualmente en rutas y transectos específicos entre puertos o regiones. Estos datos serán utilizados por la RAN para análisis y evaluación.
Esta no es la primera vez que Australia utiliza naves civiles con propósitos militares; el Craft of Opportunity Program (COOP) convirtió buques comerciales y civiles en dragaminas bajo el mando directo de la RAN, aunque el programa fue interrumpido a principios de la década pasada.
China, la principal amenaza
Esta adquisición tiene como objetivo principal la identificación de China como la mayor amenaza en la región, y permite a Australia enfrentarse a posibles riesgos submarinos y desarrollar sus capacidades de autodefensa. Los sistemas SURTASS-E no solo mejorarán la seguridad marítima, sino que también ayudarán a EE. UU. a vigilar lo que ocurre bajo el agua en el Pacífico Occidental.
China, por su parte, también ha utilizado embarcaciones civiles en ejercicios militares. El año pasado, la Armada del Ejército Popular de Liberación chino llevó a cabo ejercicios similares, cargando transbordadores civiles con tanques y artillería autopropulsada, navegando libremente entre Taiwán y China.
Sonares estadounidenses en juego
El sistema SURTASS-E consiste en un conjunto de hidrófonos remolcados por un buque que convierte la energía mecánica de los submarinos sumergidos en una señal eléctrica. De esta manera, los expertos a bordo del buque pueden determinar el tipo y la categoría del submarino en función del eco devuelto. El buque debe moverse a 3.2 nudos para que el sistema funcione correctamente.
La RAN recibirá de EE. UU. el equipamiento completo, la integración y el servicio posterior de los sistemas de misión SURTASS-E, con Lockheed Martin como ejecutor del pedido. La cantidad exacta de sistemas que Australia comprará no ha sido revelada por la Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa (DSCA).
Alianza estratégica entre Australia y EE. UU.
La venta de SURTASS-E a Australia fortalece la larga historia de cooperación comercial y militar entre EE. UU. y Australia. En realidad, Australia es un guardián importante y estratégico para los estadounidenses en el Pacífico Occidental.
Esta colaboración entre ambos países demuestra el compromiso de EE. UU. y Australia en mantener la seguridad y la estabilidad en la región, especialmente frente al creciente poderío militar de China y las tensiones en el Mar del Sur de China y el estrecho de Taiwán.