Contrato de 600 millones de dólares otorgado a Boeing Defence Australia para modernizar flotas de F/A-18F Super Hornet y EA-18G Growler.
La Real Fuerza Aérea Australiana (RAAF) ha asegurado la creación de más de 350 puestos de trabajo en Queensland gracias a un nuevo contrato de 600 millones de dólares. Este contrato, adjudicado a Boeing Defence Australia, tiene como objetivo mantener y modernizar las flotas de aviones de combate F/A-18F Super Hornet y de aviones de guerra electrónica EA-18G Growler.
La extensión del contrato por cinco años permitirá que el apoyo a los programas Super Hornet y Growler continúe hasta 2030, garantizando así el mantenimiento a largo plazo de una fuerza laboral altamente calificada en la base Amberley de la RAAF. Los trabajadores australianos de la industria de Defensa estarán a cargo de la ingeniería, el mantenimiento y la gestión de proyectos para el sostenimiento y la modernización de estas importantes flotas.
El ministro de Industria de Defensa, Pat Conroy, destacó la importancia de este contrato para la seguridad y estabilidad de Australia: “En un momento de escalada de las tensiones mundiales, es primordial mantener aeronaves de primer nivel y una mano de obra local altamente cualificada. Esta prórroga del contrato refuerza nuestra preparación ante cualquier posible desafío. Una industria de defensa fuerte es también crucial para proteger a los australianos y sus intereses, así como para contribuir a la estabilidad regional”.
El Gobierno australiano muestra su firme compromiso con el apoyo a la industria y la mano de obra de defensa de Australia, asegurando la continuidad de estos importantes puestos de trabajo en el sector de la defensa.
Más del 90% del valor del contrato se destinará a Australia, principalmente en el sudeste de Queensland. El contrato de Mantenimiento de Combate Aéreo y Ataque Electrónico con Boeing Defence Australia, que comenzó en julio de 2016 por un período inicial de 5 años, ha sido ampliado por segunda vez, elevando su valor total a 1.200 millones de dólares.
Esta ampliación del contrato se produce en un momento en que la capacidad de ataque electrónico aerotransportado del EA-18G Growler alcanza su capacidad operativa final. El Escuadrón n.º 6 de la Base Amberley de la RAAF opera esta capacidad de Ataque Electrónico Aerotransportado, que incluye 12 aviones EA-18G Growler, el Sistema Táctico de Interferencias ALQ-99 y la serie de misiles antirradiación AGM-88.
El contrato original, firmado en 2007, buscaba reemplazar provisionalmente los aviones F-111 de la RAAF con 24 F/A-18F Super Hornet debido a retrasos en el programa del F-35. Además, en 2013, se notificó al Congreso de Estados Unidos una posible venta de 12 F/A-18E/F y 12 EA-18G a Australia, que finalmente optó por adquirir 12 nuevos EA-18G en lugar de convertir aeronaves F/A-18F.