Tras los informes sobre la mejora de la capacidad del caza de combate J-20 para comandar un enjambre de drones, China parece estar buscando mejorar las características de su avión furtivo para la guerra de la información.
Según un reciente informe de SCMP, el modelo biplaza podría ser utilizado como interferente electrónico táctico y como avión de alerta temprana avanzada en el futuro campo de batalla.
El J-20 ha sido desarrollado pensando en la mejora del sigilo y la movilidad, y tiene el potencial de proporcionar acceso a una serie de opciones de guerra aérea antes no disponibles.
El J-20 “Mighty Dragon” entró en servicio en 2017. La versión gemela de la aeronave ha estado en el candelero durante un tiempo, con varias imágenes que hacen regularmente la ronda en Internet.
El primer y el segundo prototipo del J-20 biplaza se presentaron en octubre de 2021 y agosto de 2022, respectivamente.
El último informe, que cita un artículo de una revista militar china, sostiene que el papel de los aviones de quinta generación en la guerra de la información ha evolucionado últimamente debido a las mayores capacidades de la aeronave.
En un artículo publicado en el número de agosto de la revista Ordnance Industry Science Technology (Industria de armamento Ciencia y tecnología) se afirmaba que los expertos están buscando un caza de quinta generación que también pueda funcionar como “un bloqueador electrónico táctico, un pequeño avión táctico de alerta temprana, un avión de reconocimiento furtivo de alta velocidad y el avión de control de un enjambre de drones”.
Durante el vuelo, un piloto solitario tendría dificultades para comunicar estrategias con otros aviones o realizar tareas de alerta temprana. Sin embargo, el J-20 biplaza podría permitir realizar estas actividades simultáneamente.
En el J-20 biplaza, según el artículo, el piloto del asiento delantero se encargaría de volar, mientras que el piloto del asiento trasero se encargaría de interferir. “Esta plataforma de interferencia táctica de quinta generación, sigilosa y de alta velocidad, se convertirá en una pesadilla para los equipos electrónicos del enemigo”, añadía el artículo.
Dicho esto, el J-20 funcionará mucho más eficazmente como un pequeño avión de alerta temprana gracias a la completa separación del piloto del asiento trasero de las funciones del piloto del asiento delantero en términos de comunicación y mando.
¿Puede utilizarse el J-20 para la guerra de la información?
El J-20 es actualmente el único avión de combate de quinta generación con una variante biplaza en fase de desarrollo. El modelo ha sido aclamado como un elemento crítico del creciente poder aéreo de China.
Recientemente, la cadena de televisión estatal CCTV mostró un J-20 biplaza al mando de seis aviones no tripulados de ataque furtivos del tipo GJ-11 Sharp Sword. Fue probablemente la primera vez que los medios oficiales admitieron que el fabricante creó una variante del J-20 de dos asientos para albergar un “oficial de armas”.
Además, Shen Jinke, portavoz de las fuerzas aéreas chinas, afirmó el mes pasado que los cinco comandos de teatro de la nación están utilizando el avión de combate furtivo propio del ejército chino.
Jinke afirma que el avión de guerra ha sido estacionado cerca de potenciales puntos conflictivos como el Estrecho de Taiwán, el Mar de China Meridional y el Mar de China Oriental.
SCMP citó a Akhil Kadidal, especialista en aviación de la editorial de la industria de defensa Janes, sugiriendo que la instalación de sistemas de alerta temprana y equipos de inteligencia electrónica en el J-20 podría ser compleja.
Sostuvo que el avión tiene una capacidad limitada para incluir un sistema interno de alerta temprana de última generación. Sería necesario mejorar las capacidades de alerta temprana e inteligencia electrónica del avión, por lo que China tendría que crear un módulo externo.
Pero aún no se han utilizado imágenes para respaldar la integración del J-20 de tales tecnologías externas.
A pesar de las dificultades, Kadidal creía que la modificación era factible, ya que China tiene un historial de realizar este tipo de modificaciones y estaba interesada en convertir aviones con capacidad de combate de base en activos de inteligencia electrónica.
Según Song Zhongping, antiguo instructor del Ejército Popular de Liberación (EPL), el artículo reflejaba una tendencia en el desarrollo de aviones.
El J-20 probablemente adquirirá características más sofisticadas, como la interferencia electrónica y la alerta temprana, dijo Zhongping.
Según una evaluación del Departamento de Defensa de EE.UU. de 2016, el desarrollo por parte de China del J-20, un avión avanzado, es un paso crucial en las ambiciones del país de aumentar su capacidad de proyección de fuerza regional y de atacar bases aéreas e instalaciones cercanas.