La administración Trump ha aprobado la venta de 66 cazas de combate F-16 a Taiwán en un movimiento que se espera que enfurezca a China.
Taiwán recibirá la última versión del caza construido por Lockheed Martin, el F-16C/D Block 70, en un acuerdo valorizado en 8.000 millones de dólares, dijo el Departamento de Estado.
Mike Pompeo, secretario de Estado, dijo en una declaración que el presidente Donald Trump había dado luz verde a la venta propuesta después de que el Congreso fuera notificado la semana pasada.
Los F-16 “son profundamente coherentes con los acuerdos, la relación histórica entre Estados Unidos y China”, dijo Pompeo.
“Nuestras acciones son consistentes con la política de los EE.UU. en el pasado. Simplemente estamos cumpliendo los compromisos que hemos contraído con todas las partes”.
El plan de Taiwán de mejorar sus defensas aéreas se produce en medio de las crecientes incursiones militares chinas en su espacio aéreo.
Pekín considera a Taiwán como parte de China en espera de la reunificación, pero la isla es autodirigida y es un aliado cercano de los Estados Unidos.
En un comunicado, la Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa, que supervisa las ventas militares extranjeras de EE.UU., dijo que la compra por parte de Taiwán de los F-16 “no alterará el equilibrio militar básico en la región”.
“Esta venta propuesta contribuirá a la capacidad del receptor para proveer la defensa de su espacio aéreo, la seguridad regional y la interoperabilidad con los Estados Unidos”.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Geng Shuang, dijo el lunes que las ventas de armas de EE.UU. a Taiwán “violan gravemente” los acuerdos entre Washington y Pekín y “constituyen una grave injerencia en los asuntos internos de China”.
Estados Unidos debería “cancelar inmediatamente las ventas de armas planeadas y dejar de vender armas y contactos militares con Taiwán”, dijo. “De lo contrario, los EE.UU. tendrán que soportar todas las consecuencias”.
En Tapei, el presidente Tsai Ing-wen dijo que la venta ayudaría a Taiwán a construir una nueva fuerza aérea y aumentar su capacidad de defensa aérea. En una publicación en Facebook, Tsai dijo que estaba agradecida por el “continuo apoyo” de Washington a la defensa nacional de Taiwán.
Taiwán ya cuenta con una flota de F-16 de viejo modelo adquiridos en 1992, que han sido objeto de varias mejoras.
Lockheed Martin dijo que la versión más reciente, el F-16 Block 70/72, incluía nuevas tecnologías de aviónica, armas y radares. También era estructuralmente más fuerte, dijo la compañía, para que “pueda volar y luchar hasta 2070 y más allá”.
La aprobación de la venta se produce cuando Washington y Pekín se enfrentan en duras negociaciones comerciales que, según los economistas, están perjudicando a ambas superpotencias, así como arrastrando a la economía mundial.