El primer buque teledirigido de China operado por Inteligencia Artificial (IA) ha superado con éxito su prueba inicial en el mar, y sus desarrolladores, Beikun Intelligence, afirman que algunas de sus capacidades tecnológicas son “líderes mundiales”.
El director de Beikun, Mu Haifang, declaró al Zhoushan Daily que el buque de superficie no tripulado (USV) recorrió con éxito dos rutas establecidas y recogió datos según lo previsto.
El USV de 200 toneladas, que se asemeja a un híbrido entre el buque teledirigido estadounidense Sea Hunter y el destructor estadounidense de clase Zumwalt, completó su viaje inaugural de tres horas frente a la costa de Zhoushan, en la provincia oriental de Zhejiang, según el South China Morning Post.
“Su característica más distintiva es su cabina de inteligencia artificial con tecnologías de navegación autónoma, y todas las piezas del barco están fabricadas íntegramente en China”, señaló Mu.
Aunque el USV, aún sin nombre, tiene un gran parecido con el destructor furtivo más avanzado de la Armada estadounidense, el USS Zumwalt, sobre todo por su superestructura cuadrada, su morro perforado por las olas y la forma de su casco.
El USV chino tiene un trimarán en su popa, una característica de diseño vista por primera vez en el Sea Hunter, que ha estado en pruebas desde su lanzamiento en 2016. En una prueba realizada en 2018-19, navegó de forma autónoma desde San Diego, en California, hasta Pearl Harbour, en Hawái, y de vuelta, en un viaje de ida y vuelta de más de 8.300 km (5.200 millas), según el South China Morning Post.
El barco chino iguala en tamaño al Sea Hunter de la Marina estadounidense, el mayor USV del mundo, con 40 metros de largo y 13 de ancho, y un desplazamiento de 145 toneladas, frente a los 190 metros por 25 metros y 15.000 toneladas de desplazamiento del Zumwalt.
El fabricante del USV chino, Beikun, no dijo cuál es el uso exacto del buque, pero declaró que estaba diseñado para alcanzar los objetivos de navegación en alta mar, bajo ruido, inteligencia, sigilo, así como navegación no tripulada y autónoma, según el informe del Zhoushan Daily.
“En la actualidad, la embarcación no tripulada navega de forma autónoma en aguas relativamente abiertas, y aún queda un trecho por recorrer antes de que alcance el objetivo de la navegación autónoma de alta velocidad”, añadió Mu.