La NNSA finalizó la producción de la bomba nuclear táctica B61-12, tras 17 años de diseño y un gasto aproximado de 9.000 millones de dólares.
Producción de la última B61-12 culmina tras años de desarrollo
Después de 17 años de diseño, la Administración Nacional de Seguridad Nuclear (NNSA) confirmó que la última unidad de producción de la bomba B61-12 fue completada el 18 de diciembre de 2024. Sin embargo, el anuncio oficial se realizó el 7 de enero de 2025. El proyecto, que forma parte del Programa de Extensión de Vida (LEP), tuvo un coste total de alrededor de 9.000 millones de dólares.
En los primeros meses de 2024, la NNSA ya había reportado la finalización de los entrenadores, diseñados para certificar al personal y a las bases aéreas antes de la entrega de los sistemas de armas. Estos dispositivos permiten a los aviadores familiarizarse con el manejo y mantenimiento de las bombas. El programa incluyó la producción de más de 100 armas de entrenamiento militar, distribuidas en tres versiones del Entrenador Tipo 3.
La primera unidad de producción (FPU) de la B61-12 fue entregada en 2021, iniciando su fabricación a pleno rendimiento en 2022. Según la NNSA, la producción total del LEP concluirá en el año fiscal 2026. Jill Hruby, administradora de la NNSA, destacó en el anuncio que el cumplimiento de los plazos refleja la capacidad de la agencia para satisfacer las necesidades del Departamento de Defensa y los requerimientos de disuasión.
Este programa garantiza la seguridad, protección y efectividad de las bombas, al tiempo que sustituye las variantes B61-3, -4, -7 y -10. La B61-12 extiende su vida útil por al menos 20 años gracias a la renovación y reemplazo de todos sus componentes nucleares y no nucleares.
Datos clave sobre la modernización de la B61-12
- La producción de la B61-12 comenzó a pleno rendimiento en 2022, tras la entrega de la primera unidad en 2021.
- El coste total del programa se estima en 9.000 millones de dólares, con un precio unitario de 22,5 millones de dólares.
- Más de 100 armas de entrenamiento fueron fabricadas para certificar al personal militar.
- La B61-12 reemplaza a las variantes B61-3, -4, -7 y -10, consolidando su uso en el arsenal estadounidense.
B61-13: el próximo paso en el arsenal nuclear estadounidense
Tras completar la producción de la B61-12, la NNSA avanza con el desarrollo de la bomba B61-13, cuya primera unidad de producción (FPU) está prevista para el año fiscal 2026. El programa, anunciado en 2023, contempla su finalización para el año fiscal 2028.
La B61-13 reemplazará parte de las bombas B61-7 en el arsenal, manteniendo el mismo número total de armas nucleares. Esta nueva variante combina las características de seguridad y precisión de la B61-12 con el rendimiento de la B61-7, estimado entre 340 y 360 kilotones. Según la NNSA, este desarrollo cumple con los compromisos de la Revisión de la Postura Nuclear, al proporcionar capacidades mejoradas para enfrentar objetivos militares complejos.
El comunicado de octubre de 2024 destacó que la B61-13 ofrecerá al presidente de Estados Unidos opciones adicionales de disuasión contra objetivos más difíciles y de gran alcance. Su diseño permitirá ser transportado por el B-21 Raider, aunque aún no está previsto que sea compatible con la flota F-35.
Historia y evolución de las bombas nucleares B61
El diseño de las bombas nucleares B61 data de diciembre de 1962. Desde entonces, han sido desarrolladas en 14 versiones diferentes, comenzando con la B61-0 en 1967. A lo largo de las décadas, se han producido más de 3.155 bombas de este modelo, de las cuales unas 540 permanecían activas y 415 en reserva en 2012.
El programa B61-12 fue diseñado para sustituir a las bombas B61-4, que comenzaron su producción en 1979, reutilizando componentes de ojivas más antiguas. Estas armas, junto con las B61-11 antibúnker, consolidaron la B61-12 como la única bomba nuclear lanzada por gravedad en el inventario estadounidense.
La versión original del B61 era un arma no guiada con una carcasa aerodinámica y un peso de alrededor de 700 libras (unos 300 kg). Estaba diseñada para ser transportada por aviones tácticos de la Fuerza Aérea de EE. UU. y de países socios de la OTAN, bajo el Programa de Intercambio de Armas Nucleares.
Integración y características técnicas de las bombas mejoradas
La versión mejorada B61-12 incluye un conjunto de cola guiada construido por Boeing, que incorpora un sistema de navegación inercial (INS) y motores de cohetes de giro. Este diseño mejora significativamente la precisión, reduciendo el margen de error a solo 30 metros, lo que permite emplear ojivas de menor potencia.
La Fuerza Aérea de EE. UU. ha certificado varias plataformas para transportar las bombas B61-12, incluidos los bombarderos B-1 Lancer, B-2 Spirit y B-52 Stratofortress, así como los cazas F-16 Fighting Falcon y F-15E Strike Eagle. En el ámbito internacional, aviones como el Panavia Tornado alemán e italiano también están certificados para su uso.
En 2020, el F-15E Strike Eagle fue el primer avión en ser certificado para portar la B61-12, seguido por el F-35A Lightning II y otras aeronaves. Actualmente, se trabaja para integrar esta bomba en el futuro B-21 Raider, reafirmando su relevancia en la estrategia de defensa nuclear de EE. UU.