Estados Unidos suma a su flota 36 cazas F-35 modernizados tras la suspensión temporal de las entregas debido a problemas de integración del software TR-3.
F-35 Lightning II: cazas entregados aún no están listos para combate
Estados Unidos ha incorporado 36 cazas F-35 Lightning II, construidos por Lockheed Martin, tras superar problemas de integración con el software TR-3 que detuvieron las entregas en 2023. El ejército confirmó que 29 de estos aviones ya han despegado y están estacionados en sus respectivas bases. El general Michael Schmidt informó que estos aviones fueron retirados de las instalaciones de Lockheed Martin en Fort Worth, Texas, aunque no se ha precisado la cantidad exacta de cazas fabricados y almacenados durante la interrupción.
Sin embargo, las fuerzas armadas de EE. UU. han aclarado que estos 36 cazas aún no están listos para el combate. Se espera que lo estén el próximo año tras una serie de inspecciones y pruebas. Cada F-35 pasará por verificaciones exhaustivas para garantizar que sus sistemas, software y componentes cumplan con los estándares operativos.
El software del F-35 es clave para su rendimiento. La instalación y verificación de nuevas versiones es crucial para asegurar su correcto funcionamiento, ya que la efectividad del avión depende en gran parte de su software. Por ello, el entrenamiento de los pilotos también es un proceso largo, lo que retrasa su preparación para misiones de combate.
Infraestructura y mantenimiento: elementos clave para la operación del F-35
Un aspecto vital para la operación del F-35 es la infraestructura de mantenimiento. Las herramientas, piezas de repuesto y personal capacitado deben estar disponibles de inmediato. También es fundamental integrar estas aeronaves en el marco operacional de la Fuerza Aérea, lo que implica coordinación con otras unidades y una planificación estratégica.
Antes de que los F-35 se consideren listos para el combate, deben pasar por evaluaciones adicionales para asegurar que cumplen con los estándares de rendimiento. Esto es clave para que las fuerzas armadas puedan desplegar estos aviones de manera efectiva en misiones tácticas.
En cuanto a las entregas a países aliados, podrían producirse más retrasos debido a la necesidad de conversaciones sobre las prioridades en la distribución de los F-35. Estos debates pueden alargar el tiempo de entrega a otras naciones participantes en el programa.
Retrasos en la entrega del F-35 afectan a varios países aliados
Estados Unidos tiene prioridad en la adquisición de los F-35, ya que considera a este avión un activo estratégico clave para su ejército y su Fuerza Aérea. Sin embargo, otros países como el Reino Unido, Italia y Australia, que han cofinanciado el programa, también se encuentran entre los principales receptores del F-35.
Las diferencias en las prioridades entre los países aliados, junto con las limitaciones de producción, complican el proceso de entrega. Las naciones de la OTAN que buscan reforzar sus capacidades de combate han solicitado entregas más rápidas ante la creciente inestabilidad global. Sin embargo, la producción limitada y la actualización de tecnologías como el software TR-3 han retrasado los tiempos.
La necesidad de coordinación y transparencia entre las partes involucradas es crucial para evitar más demoras en la entrega de estos aviones, especialmente para las fuerzas aéreas de los países que dependen del F-35 para reforzar su operatividad militar.
Noruega, Países Bajos, Bélgica y otros afectados por retrasos en entregas
Noruega, que ha encargado 52 cazas F-35, ha recibido hasta la fecha 34, de los cuales seis están en Estados Unidos para entrenamiento. Se espera que las entregas finales se completen en 2025, debido a los retrasos relacionados con la actualización tecnológica.
Los Países Bajos han recibido 39 de los 52 aviones F-35 que solicitaron, con ocho de ellos también en Estados Unidos para capacitación. Esperan recibir el resto para finales de 2024. Bélgica, que encargó 34 F-35, aún no ha recibido ninguno, aunque las entregas están programadas para comenzar pronto.
Finlandia y Polonia también enfrentan retrasos. Finlandia ha pedido 64 cazas y espera recibir los primeros dos a fines de 2024, mientras que Polonia espera recibir sus dos primeros F-35 este año, con más entregas en 2024.
Incremento de actividades militares en Europa agrava la situación
Estos retrasos en la entrega de los F-35 están afectando la preparación operativa de muchos países, particularmente en Europa, donde las actividades militares han aumentado significativamente. Las naciones que dependen de sus antiguos cazas se ven obligadas a adaptarse a una situación en la que no cuentan con la totalidad de su flota F-35.
Este escenario genera incertidumbre sobre la capacidad de respuesta rápida de los países que aún no han recibido sus aviones, afectando potencialmente la seguridad regional. A medida que se intensifican las tensiones internacionales, la rápida entrega y despliegue del F-35 es más importante que nunca.
El compromiso de los países aliados con el programa F-35 sigue siendo firme, pero los problemas técnicos y de producción continúan causando retrasos. Esto subraya la importancia de mantener una comunicación efectiva entre las partes y coordinar las entregas de manera eficiente.