• Quiénes somos
  • Contacto
  • Embajadas
  • Oficina PM
  • Directorio
  • Jerusalén
  • Condiciones de servicio
  • Política de Privacidad
  • Login
  • Register
martes, octubre 14, 2025
Noticias de Israel
  • Inicio
  • FDI
  • Gaza
  • Terrorismo
  • Mundo
  • Zona de guerra
  • Siria
  • Irán
  • Antisemitismo
  • Tecnología
  • Arqueología
Noticias de Israel

Portada » Zona de guerra » EE. UU. necesita 200 B-21 Raider en lugar de solo 100 unidades

EE. UU. necesita 200 B-21 Raider en lugar de solo 100 unidades

14 de octubre de 2025

La Fuerza Aérea evalúa expandir su flota de B-21 Raider a al menos 145 o hasta 200 aeronaves para responder a amenazas globales, según informes y análisis oficiales.

Fuerza aérea de ee. uu. evalúa expansión de flota b-21 raider

La Fuerza Aérea de Estados Unidos evalúa la expansión de su flota de bombarderos furtivos B-21 Raider más allá de las 100 unidades inicialmente previstas, con estudios y declaraciones oficiales que apuntan a un mínimo de 145 aeronaves e incluso hasta 200 para responder a amenazas globales, según informes del Comando Estratégico y análisis presupuestarios del Departamento de Defensa. El programa, que la Oficina de Capacidades Rápidas del Departamento de la Fuerza Aérea lidera bajo la dirección del Subsecretario de Defensa para Adquisiciones y Sostenimiento, se desarrolla en Palmdale, California.

Allí ya se han producido tres unidades para pruebas, con el primer vuelo que se registró el 10 de noviembre de 2023. Northrop Grumman, adjudicataria del contrato de ingeniería y fabricación el 27 de octubre de 2015, colabora con empresas como Pratt & Whitney para motores y Collins Aerospace para sistemas electrónicos, en un esfuerzo que busca reemplazar a los B-1 Lancer y B-2 Spirit en misiones de ataque penetrante. El B-21 Raider se configura como un bombardero de ataque penetrante con capacidad dual para municiones convencionales y nucleares.

El diseño permite operar en entornos de alta amenaza y formar el eje principal de la futura fuerza de bombarderos junto a los B-52 modernizados. Su arquitectura abierta permite integrar sensores avanzados, comunicaciones en red y actualizaciones rápidas, lo que facilita la adaptación a evoluciones en las defensas adversarias. La aeronave incorpora tecnología furtiva de nueva generación, con un rango operativo superior al del B-2 aunque de tamaño ligeramente menor, y puede transportar una amplia gama de armamento, desde bombas de gravedad como las B61 y B83 hasta municiones de largo alcance.

El Comando Global de Ataque de la Fuerza Aérea ha destacado que esta plataforma asegura la supervivencia en espacios aéreos disputados, porque contribuye a la disuasión nuclear visible y flexible como parte de la tríada estratégica estadounidense, que incluye misiles balísticos intercontinentales y submarinos nucleares. En términos de adquisición, el plan oficial establece un mínimo de 100 unidades, con un costo unitario promedio de $692 millones en valores de 2022, que se calcula sobre el total de fondos para fabricación, equipo de apoyo, entrenamiento y repuestos.

El segundo B-21 Raider volando por encima.

Datos clave de adquisición y capacidades del b-21 raider

  • Primer vuelo registrado el 10 de noviembre de 2023.
  • Contrato de ingeniería y fabricación otorgado el 27 de octubre de 2015.
  • Costo unitario promedio de $692 millones en 2022.
  • Presupuesto para 2026 asigna 4739,1 millones a desarrollo y 5551,2 millones a adquisición.
  • Bases operativas en Ellsworth, Whiteman y Dyess.

Presupuesto y bases operativas para el programa b-21 raider

Para el año fiscal 2026, el presupuesto del Departamento de Defensa asigna 4$739,1 millones a investigación, desarrollo, pruebas y evaluación, más 5551,2 millones a adquisición, lo que suma 10 290,3 millones y cubre la transición a producción inicial de bajo volumen, porque incluye piezas de largo plazo. Este financiamiento continúa el avance desde el diseño crítico que se completó en 2018 y el primer contrato de producción inicial que se otorgó el 23 de enero de 2024.

La Fuerza Aérea ha seleccionado bases operativas clave: Ellsworth en Dakota del Sur como la principal y sede de la unidad de entrenamiento formal, seguida de Whiteman en Misuri y Dyess en Texas, con certificación nuclear prevista dentro de los dos años posteriores a la capacidad operativa inicial, programada para mediados de la década de 2020. Diversos estudios y testimonios oficiales han cuestionado si las 100 unidades bastan para cubrir las demandas operativas actuales.

Un análisis de la Fuerza Aérea en 2017 propuso elevar el pedido inicial a 145 aeronaves, mientras que el jefe del Comando Global de Ataque en 2016 indicó que la flota podría expandirse hasta 175 o 200 para fortalecer la capacidad de disuasión. El general Anthony Cotton, comandante del Comando Estratégico de Estados Unidos, declaró ante el Congreso que el país requiere al menos 145 B-21 para mantener la tríada nuclear, disuadir agresiones y operar en entornos disputados, porque reemplaza efectivamente a los envejecidos B-1 y B-2.

Esta cifra se alinea con recomendaciones de expertos que, basados en proyecciones de la flota total de bombarderos, sugieren una fuerza de al menos 300 aeronaves, con 200 de ellas furtivas y penetrantes como el B-21, para responder a desafíos de potencias como China y Rusia. La revisión actual de la estructura de fuerzas, ordenada por el Congreso, examina opciones para incrementar el tamaño de la flota, posiblemente al reasignar fondos de otros programas.

Análisis de expansión y beneficios estratégicos del b-21 raider

El B-21 Raider: tan invisible que parece un insecto en los radares
B-21 Raider

Kathy Warden, directora ejecutiva de Northrop Grumman, mencionó en una conferencia de resultados el 24 de octubre de 2024 que la Fuerza Aérea considera el B-21 en esta evaluación, y destacó su producción por debajo de los costos proyectados y la disposición de la empresa para elevar la tasa si se solicita. Un informe del Instituto Mitchell para Estudios Aeroespaciales, junto con análisis de otras entidades, resalta que un incremento a 200 unidades mejora la capacidad convencional y nuclear y reduce el costo por aeronave al distribuir gastos fijos sobre un mayor volumen, porque fortalece la base industrial de defensa mediante pedidos estables para subcontratistas.

Históricamente, programas similares han sufrido reducciones por restricciones presupuestarias, como el B-2 limitado a 21 unidades operativas en lugar de las 132 planeadas, o el F-22 limitado en 187 frente a más de 700 requeridas. Para evitar repeticiones, propuestas incluyen duplicar la tasa de producción anual a 20 aeronaves, lo que exigiría una segunda planta de fabricación con un costo estimado de $800 millones. Esta expansión diversificaría riesgos, como fallos en la única instalación de Palmdale por accidentes o ataques, y aceleraría la entrega para alcanzar la flota necesaria antes de finales de la década de 2030.

Además, un mayor volumen facilitaría ventas a aliados cercanos, similares a las del F-35, porque mejora la interoperabilidad y reduce costos unitarios mediante economías de escala. El B-21 se integra en una familia más amplia de sistemas para ataque de largo alcance, que incluye inteligencia, vigilancia, reconocimiento y guerra electrónica. Su diseño modular permite operaciones tripuladas o no tripuladas, porque amplía su versatilidad en misiones que van desde la destrucción de objetivos estratégicos hasta el debilitamiento de capacidades adversarias para sostener guerras.

La Fuerza Aérea ha completado evaluaciones ambientales y procesos regulatorios para las bases, lo que asegura que el despliegue cumpla con normativas nacionales. Con la producción inicial en marcha, las primeras entregas operativas se esperan en Ellsworth, donde se concentrará el entrenamiento de tripulaciones. En el contexto presupuestario reciente, el año fiscal 2025 asignó 2$654,1 millones a desarrollo y 2600,5 millones a adquisición.

Compromiso presupuestario y contexto global del b-21 raider

Primer vuelo del B-21 Raider: un amanecer innovador en aviación
B-21 Raider

Estas cifras, combinadas con las del 2026, totalizan más de 15 000 millones en los próximos dos años, porque priorizan la transición de pruebas a producción. Tres unidades ya participan en campañas de vuelo y suelo, porque validan sistemas que aseguran penetración en defensas antiaéreas modernas. Declaraciones de altos funcionarios, como la secretaria de la Fuerza Aérea durante su confirmación, respaldan que 145 unidades representan un objetivo razonable para mitigar riesgos.

Analistas destacan que la flota actual de bombarderos, proyectada en 172 para 2030 con predominio de B-52 y B-1 de más de 40 años de antigüedad, resulta vulnerable en espacios aéreos disputados, lo que justifica la expansión. China, por ejemplo, ha incrementado su producción de bombarderos H-6N y desarrolla el H-20 furtivo, porque despliega unidades en islas disputadas del mar del Sur de China.

La propuesta de una segunda planta acelera la acumulación de inventario y genera empleos calificados y fortalece economías locales fuera de California. Al distribuir la producción, se reduce la dependencia de un solo sitio, porque protege el programa contra desastres naturales o acciones hostiles. Esta medida, junto con pedidos multianuales estables, incentiva la participación del sector privado en la cadena de suministro, porque contrarresta la contracción de proveedores por volúmenes bajos en programas pasados.

El B-21 honra a los Raiders de Doolittle de la Segunda Guerra Mundial, porque simboliza su rol en elevar la moral y forzar defensas adversarias. Como primer bombardero del siglo XXI.

© 2017–2025

Welcome Back!

Login to your account below

Forgotten Password? Sign Up

Create New Account!

Fill the forms below to register

All fields are required. Log In

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.

Log In
No Result
View All Result
  • Inicio
  • FDI
  • Gaza
  • Terrorismo
  • Mundo
  • Zona de guerra
  • Siria
  • Irán
  • Antisemitismo
  • Tecnología
  • Arqueología

© 2019 - 2025 Todos los derechos reservados.