El primer F-35A llegará a Misawa en 2026, reemplazando gradualmente los F-16. Japón está plenamente informado sobre los planes de Estados Unidos.
Detalles sobre el reemplazo de los F-16 por F-35A
- El primer F-35A será desplegado en Misawa en 2026
- Iwakuni y Kadena también recibirán nuevos despliegues
- El 35th Fighter Wing lidera el rol táctico en Misawa
- Actualización estratégica en la región del Indo-Pacífico
- La transición de los F-16 al F-35 en Misawa y sus ventajas
- Preocupaciones locales por el impacto del F-35 en Japón
- El F-35 como herramienta clave en defensa aérea
- El desafío de equilibrar estrategia y sostenibilidad local
- Preguntas y respuestas sobre la transición de F-16 a F-35 en Japón
El primer F-35A será desplegado en Misawa en 2026
En una entrevista reciente con NHK, se confirmó que Estados Unidos reemplazará los F-16 por F-35A en la base aérea de Misawa, Japón. Según los reportes, el primer F-35A, identificado con el código WW, llegará en la primavera de 2026. A partir del verano de 2024, los F-16 comenzarán a retirarse de manera gradual.
Las autoridades japonesas declararon que el Gobierno de Japón, así como los funcionarios de la prefectura de Aomori y de la ciudad de Misawa, han sido informados con antelación sobre esta transición. Misawa se considera una base clave para el compromiso de Estados Unidos con un “Indo-Pacífico libre y abierto”, por su cercanía a Rusia. En paralelo, la base aérea de Kadena, ubicada en el extremo opuesto de Japón, juega un rol estratégico debido a su proximidad a Taiwán y China.
El Pentágono, en un comunicado de julio de 2024, ya había anunciado el despliegue de aviones F-35A en Japón, aunque en ese momento no se había precisado el cronograma para reemplazar los F-16 estacionados en Misawa.
La Fuerza Aérea de Estados Unidos, a través de un comunicado oficial, destacó que se incrementará la capacidad táctica de Misawa con la sustitución de 36 aviones F-16 por 48 aviones F-35A. Esta medida refuerza las capacidades regionales y fortalece la alianza entre Estados Unidos y Japón, con una inversión de más de 10.000 millones de dólares.
Iwakuni y Kadena también recibirán nuevos despliegues
La base aérea de Misawa no será la única que contará con aviones F-35 en Japón. La Estación Aérea del Cuerpo de Marines de Iwakuni, situada en la prefectura de Yamaguchi, alberga ya dos escuadrones de F-35B de la Marina: VMFA-242 y VMFA-121. Además, también opera el escuadrón de F-35C de la Armada, VFA-147.
Por otro lado, el Pentágono confirmó que la Fuerza Aérea de Estados Unidos desplegará aviones F-15EX Eagle II en la base aérea de Kadena, ubicada en Okinawa, en el sur de Japón. Este despliegue forma parte de preparativos más amplios para enfrentar posibles conflictos de alta intensidad en el Pacífico.
Estos cambios en las bases aéreas estadounidenses en Japón responden a una estrategia más amplia de fortalecimiento de la seguridad regional y actualización tecnológica, acorde con las tensiones crecientes en la región del Indo-Pacífico.
El 35th Fighter Wing lidera el rol táctico en Misawa
En Misawa, el 35th Fighter Wing es la principal unidad operativa encargada de los F-16C/D Block 50 Fighting Falcons. Este escuadrón desempeña un papel fundamental en las operaciones de supresión y destrucción de defensas aéreas enemigas (SEAD/DEAD), lo que incluye atacar sistemas de misiles tierra-aire y radares enemigos.
El Wing, conocido como la principal organización Wild Weasel de la Fuerza Aérea, cuenta con una larga trayectoria en este rol. Su historia se remonta a 1973, cuando comenzaron los entrenamientos para las tripulaciones del F-105G Wild Weasel III, y en 1975 para el F-4C Wild Weasel IV, mientras estaban estacionados en George AFB, California.
Durante las operaciones Escudo del Desierto y Tormenta del Desierto, las tripulaciones del Wing Wild Weasel estuvieron entre las primeras en volar sobre espacios aéreos hostiles de Irak. Su experiencia y capacidades tácticas han sido esenciales para las misiones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Actualización estratégica en la región del Indo-Pacífico
La modernización de las bases estadounidenses en Japón, incluido el despliegue de F-35A en Misawa y F-15EX en Kadena, subraya la creciente importancia de esta región en la estrategia de defensa de Estados Unidos. Con estas medidas, se busca garantizar una capacidad de respuesta rápida y efectiva ante cualquier escenario de conflicto.
En conjunto, estas inversiones y movimientos reflejan el compromiso de Estados Unidos de mantener la estabilidad y seguridad en el Indo-Pacífico, reforzando al mismo tiempo su alianza estratégica con Japón.
La transición de los F-16 al F-35 en Misawa y sus ventajas
Tras la desactivación de la Base de la Fuerza Aérea George en 1992, el 35th Fighter Wing operó durante 16 meses desde la Estación Aérea Naval de Keflavik, Islandia, utilizando los F-15C en misiones de Defensa Aérea. Posteriormente, retomó su función Wild Weasel en la base de Misawa con los F-16, donde sigue activo hoy en día.
Para llevar a cabo misiones de supresión y destrucción de defensas aéreas enemigas (SEAD/DEAD), la Fuerza Aérea emplea F-16C/D Block 50, conocidos extraoficialmente como F-16CJ/DJ y, tras la actualización CCIP, como F-16CM/DM. Estos aviones están equipados con el sistema HARM (HTS) AN/ASQ-213, que permite utilizar el misil AGM-88 de alta velocidad para atacar radares enemigos de forma más efectiva.
Con la introducción del F-35 en los escuadrones Wild Weasel, se espera una mejora sustancial en la efectividad contra defensas aéreas sofisticadas. Su capacidad furtiva, junto con tecnologías avanzadas de ataque terrestre, lo posiciona como una herramienta más poderosa en comparación con los F-16. Además, su integración con armas modernas como el AGM-88G AARGM-ER y el SiAW, junto con su avanzado sistema de enlace de datos, eleva aún más sus capacidades en el campo de batalla.
Preocupaciones locales por el impacto del F-35 en Japón
A pesar de las ventajas tácticas del F-35, su llegada a Japón ha generado inquietudes. En Okinawa, donde se concentra el 70% de las bases militares estadounidenses en menos del 1% del territorio nacional, la oposición local a estas instalaciones es recurrente. Esta situación se origina en acuerdos históricos de posguerra, pero ha generado tensiones significativas con la población local.
Los principales problemas incluyen la contaminación acústica, incidentes potenciales y el deterioro medioambiental. Los motores F-135 del F-35, conocidos por ser extremadamente ruidosos, podrían agravar estas preocupaciones, especialmente considerando que el número de aviones en Misawa aumentará de 36 a 48.
La coexistencia de aviones militares y civiles en Misawa, dado que es un aeropuerto de uso dual, complica aún más la situación. Además, los escuadrones de cazas 301 y 302 de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón, que ya operan el F-35A desde esta base, contribuyen a la actividad aérea, lo que podría intensificar los impactos locales.
El F-35 como herramienta clave en defensa aérea
La llegada del F-35 a los escuadrones Wild Weasel de Estados Unidos marca un hito en la modernización de las capacidades aéreas. Sus características furtivas y su avanzada tecnología lo posicionan como el avión más adecuado para misiones de ataque a defensas aéreas enemigas, superando las capacidades de los F-16.
Con estas actualizaciones, el F-35 también ofrece mayor interoperabilidad con las fuerzas aliadas, incluyendo las unidades de defensa aérea de Japón, que ya operan este modelo en Misawa. Este enfoque fortalece la alianza entre ambas naciones en el contexto del Indo-Pacífico.
El desafío de equilibrar estrategia y sostenibilidad local
Sin embargo, el despliegue del F-35 debe equilibrarse con la necesidad de minimizar el impacto en las comunidades locales. En Okinawa y Misawa, la oposición a las bases estadounidenses pone de manifiesto la necesidad de abordar problemas como el ruido y la sostenibilidad ambiental.
El aumento de la actividad aérea militar en Misawa podría ser un desafío importante para los residentes. Aunque la modernización de la flota es vital para la seguridad regional, será crucial manejar cuidadosamente las tensiones sociales y ambientales derivadas de estos cambios.
Preguntas y respuestas sobre la transición de F-16 a F-35 en Japón
El reemplazo de los F-16 por los F-35A en Misawa busca mejorar las capacidades tácticas de la USAF. Los F-35A ofrecen tecnología furtiva y avanzadas capacidades de ataque y enlace de datos, superando a los F-16 en operaciones SEAD/DEAD. Este cambio refuerza la presencia militar en el Indo-Pacífico y la alianza estratégica entre Estados Unidos y Japón.
El primer F-35A con código WW llegará a la base de Misawa en la primavera de 2026. El retiro de los F-16 comenzará gradualmente a partir del verano de 2025, con una transición que culminará en una flota completa de 48 F-35A.
El F-35A, con su capacidad furtiva y sistemas avanzados, como el AGM-88G AARGM-ER, es más efectivo que el F-16 en misiones SEAD/DEAD. Puede penetrar defensas aéreas sofisticadas y atacar radares enemigos con mayor precisión, asegurando una ventaja táctica significativa.
El aumento de aviones militares podría intensificar problemas como contaminación acústica y preocupaciones ambientales. Los motores F-135 del F-35 son más ruidosos que los del F-16, lo que podría generar más tensiones entre la comunidad local y las autoridades.
Misawa es clave en el compromiso de un “Indo-Pacífico libre y abierto”. Su ubicación estratégica cerca de Rusia y sus capacidades conjuntas con la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón refuerzan la vigilancia y respuesta ante amenazas en la región.