En un intento por fortalecer su capacidad aérea, Egipto está en negociaciones con China para adquirir 12 cazas Chengdu J-10 Vigorous Dragon, también conocidos como Firebird.
Si se concreta el acuerdo, este país del norte de África se convertiría en el tercer operador de esta formidable aeronave, sumándose así a China y Pakistán. La adquisición de los J-10 Firebird permitiría a Egipto compensar el envejecimiento de su flota de aviones F-16 y suplir la ausencia de los cazas rusos Su-35 que no fueron entregados debido a diversas circunstancias geopolíticas.
Negociaciones entre Egipto y China
Egipto se encuentra en negociaciones con China para ampliar su inventario de cazas, específicamente el Chengdu J-10 Vigorous Dragon. Fuentes confiables indican que altos mandos militares del Ministerio de Defensa de El Cairo se reunirán con representantes del Chengdu Aircraft Industry Group durante la próxima exposición de Langkawi en Malasia.
La adquisición de estos 12 cazas J-10 Firebird representa un gran interés para Egipto, que busca modernizar su fuerza aérea.
Características del J-10C
El J-10C, la versión que Egipto considera adquirir, es la más reciente y mejorada de esta línea de aviones chinos. Equipado con un nuevo radar AESA y un buscador de imágenes infrarrojas PL-10, el J-10C ofrece mejoras significativas en comparación con su predecesor, el J-10B.
Además, su potente motor turbofán Shenyang WS-10 proporciona un empuje de 120-140 kilonewtons.

Situación actual de la flota aérea egipcia
Actualmente, la Fuerza Aérea egipcia cuenta principalmente con aviones MiG-29 de fabricación soviética y Dassault Rafales franceses. Aunque hubo intentos de adquirir los cazas rusos Su-35 Flanker-E, el acuerdo no prosperó debido a problemas relacionados con la producción y entrega. Esta situación llevó a Egipto a considerar alternativas, y es aquí donde surge la posibilidad de adquirir los cazas chinos J-10 Firebird.
Desafíos de mantener los aviones F-16 actualizados
Con una flota de 240 aviones F-16 Fighting Falcon, de los cuales 50 se utilizan para entrenamiento, Egipto se enfrenta al desafío de mantener actualizados estos aviones, que no han recibido mejoras en muchos años. A diferencia de Turquía, que también ha tenido problemas con la modernización de sus F-16, Egipto ha buscado alternativas fuera de los proveedores tradicionales.
La elección de China como potencial proveedor de cazas J-10C podría marcar un nuevo capítulo en la historia de la Fuerza Aérea egipcia.

Posición ventajosa de Egipto en el contexto de la guerra en Ucrania
Además de reforzar su flota aérea, Egipto se encuentra en una posición ventajosa en el contexto de la guerra en Ucrania. Se rumorea que el país está dispuesto a suministrar a Ucrania una cantidad ilimitada de municiones para sistemas de misiles antiaéreos y tanques Abrams.
Como uno de los principales productores de tanques Abrams después de Estados Unidos, Egipto podría usar esta posición para presionar a Washington y lograr la modernización de sus aviones F-16.
Características y armamento del J-10C
El J-10C es considerado uno de los cazas monomotor más poderosos del mundo en la actualidad. Con una longitud de aproximadamente 17 metros y un peso máximo al despegue de 19.000 kg, este avión cuenta con una autonomía máxima de 1.850 km y una velocidad máxima de vuelo de Mach 1,8. Su techo de vuelo alcanza los 18.000 metros.
En cuanto a su armamento, el J-10C está equipado con una ametralladora Gryazev-Shipunov GSh-23 para combate aéreo cercano o incursiones a baja altura. Con un total de 11 puntos duros, el avión puede transportar una amplia variedad de armas, como misiles aire-aire, misiles aire-tierra, misiles antibuque, bombas guiadas por láser, bombas de planeo, bombas guiadas por satélite y bombas no guiadas.
Impacto de la adquisición de los J-10 Firebird para Egipto
Si Egipto concreta la compra de los 12 cazas J-10 Firebird, se convertiría en el tercer país en operar esta formidable aeronave, reforzando así su capacidad aérea y modernizando su flota.
La decisión de recurrir a China en busca de una solución a largo plazo representa un paso significativo para la Fuerza Aérea egipcia en su búsqueda de mantenerse actualizada y competitiva en el panorama militar internacional.
Conclusión
La posible adquisición de 12 cazas J-10 Firebird por parte de Egipto representa un importante avance en su objetivo de fortalecer su capacidad aérea. Estas negociaciones con China permitirían a Egipto modernizar su flota de aviones, compensando el envejecimiento de los F-16 y supliendo la falta de los cazas rusos Su-35.
Con características mejoradas y un potente motor, el J-10C se presenta como una opción atractiva para Egipto en su búsqueda de mantenerse competitivo en el panorama militar internacional.