La Fuerza Aérea de EE. UU. solicita nuevas espoletas y componentes para la GBU-57 tras su uso en instalaciones nucleares iraníes en junio.
USAF impulsa mejoras en la bomba GBU-57 post-ataque a Fordo
La Fuerza Aérea de los Estados Unidos ha iniciado un proceso para adquirir espoletas mejoradas y componentes clave para la bomba GBU-57/B Massive Ordnance Penetrator (MOP), tras su primer uso en combate contra instalaciones nucleares iraníes en junio de 2025. El Centro de Gestión del Ciclo de Vida de la Fuerza Aérea (AFLCMC) emitió un aviso de contratación el 7 de julio de 2025, con el que solicita apoyo para la producción, el mantenimiento y la actualización de esta arma de 30,000 libras, diseñada para destruir búnkeres subterráneos profundos.
El aviso detalla que la Fuerza Aérea requiere asistencia para el desarrollo y la integración de espoletas avanzadas en el sistema de armas GBU-57, junto con modificaciones de software en el kit de cola KMU-612 y el sistema de espoletas BLU-127. El KMU-612/B corresponde a la sección de cola que contiene el sistema de navegación inercial con asistencia por GPS, mientras que el BLU-127/B forma la ojiva penetrante del MOP. También se requiere la producción de variantes del kit de cola KMU-612E/B, el mantenimiento del hardware y los equipos relacionados, la reparación de componentes y el soporte técnico para solucionar la obsolescencia de piezas críticas.
El general David Allvin, jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, confirmó el 26 de junio de 2025 ante el Comité de Asignaciones del Senado que el inventario de MOP está en expansión, aunque el tamaño exacto permanece clasificado. Actualmente, solo el bombardero furtivo B-2 Spirit tiene capacidad operativa para transportar el MOP, con posibilidad de cargar dos bombas por misión. Se prevé que el futuro B-21 Raider también pueda emplear esta arma, aunque probablemente con una sola unidad por vuelo debido a sus dimensiones. Los B-52 han participado en pruebas de lanzamiento, sin involucrarse en operaciones de combate.
Los ataques a Fordo en junio de 2025 representaron el primer uso del MOP en combate. Doce bombas fueron lanzadas desde bombarderos B-2, con seis impactos en cada uno de dos objetivos específicos. Las bombas perforaron sucesivamente el terreno hasta alcanzar las instalaciones subterráneas. Según el general Dan “Razin” Caine, presidente del Estado Mayor Conjunto, cada MOP fue programado con una espoleta personalizada para detonar según la profundidad y configuración del objetivo, con ángulos y trayectorias ajustadas.
Datos clave sobre la GBU-57 y su uso en Fordo
- La GBU-57/B MOP tiene un peso de 30,000 libras y está diseñada para perforar búnkeres subterráneos profundos.
- En Fordo, 12 bombas alcanzaron dos puntos, con espoletas calibradas para efectos determinados.
- El B-2 Spirit es el único avión operativo para transportar el MOP, con capacidad de dos bombas por misión.
- El ataque provocó un retraso estimado del programa nuclear iraní de entre uno y dos años, según el Pentágono.
- La espoleta tiene la función de resistir las fuerzas de impacto y activar la detonación en el momento determinado.
Importancia de las espoletas en la eficacia del MOP
La espoleta constituye un componente esencial del diseño del GBU-57, debido a que debe resistir las fuerzas generadas al atravesar materiales duros como concreto reforzado o roca. En situaciones con información limitada sobre la profundidad o diseño interno del objetivo, como Fordo, las espoletas sofisticadas resultan necesarias. Estas deben detectar cavidades subterráneas, como salas o espacios entre niveles, y activar la detonación en el punto más adecuado para causar daño estructural. El diseño de espoletas con sensores de vacío ha sido un objetivo técnico de largo plazo para el ejército de EE. UU., y los datos recopilados en los ataques de junio han permitido ajustar esta tecnología.
El aviso de contratación aclara que no implica un compromiso de compra, sino una exploración de proveedores para futuras modificaciones. No obstante, la necesidad de actualizar el GBU-57 responde a las observaciones obtenidas en Fordo, donde la exactitud y adaptabilidad de las espoletas influyeron en los resultados de la operación. El Pentágono describió los ataques como eficaces, aunque el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) advierte que Irán podría reactivar sus actividades de enriquecimiento en los próximos meses.
El empleo del MOP en operaciones ha generado inquietud respecto a reacciones técnicas de adversarios como Irán, Rusia y China, que podrían examinar los restos del armamento o los patrones de impacto para diseñar medidas de defensa. Estos países, junto con Corea del Norte, disponen de amplias instalaciones subterráneas, desde complejos nucleares hasta refugios para aeronaves y submarinos. La capacidad del MOP para alcanzar dichos blancos lo convierte en un recurso de interés estratégico para análisis militares de potencias extranjeras.
El general Allvin expresó ante el Senado que las condiciones estratégicas muestran variaciones continuas y que es probable que los adversarios modifiquen sus defensas tras la operación en Fordo. Por este motivo, la Fuerza Aérea ha iniciado mejoras del GBU-57 y desarrolla un sustituto denominado Next Generation Penetrator (NGP), orientado a ofrecer una gama más amplia de aplicaciones operativas.
Futuro del MOP y su rol estratégico global
La GBU-57 fue concebida para inutilizar estructuras como Fordo sin recurrir a armamento nuclear, criterio que orientó su diseño desde finales de la década de 2000. Desde su incorporación al arsenal en la década de 2010, ha experimentado múltiples modificaciones, en particular en sus espoletas, para aumentar su penetración y precisión. Los ataques de junio de 2025 confirmaron su utilidad como recurso técnico del inventario estadounidense, con capacidad para afectar estructuras enterradas a gran profundidad en cualquier territorio.
Además de su aplicación en Irán, el MOP posee utilidad frente a redes subterráneas extensas en China, Rusia y Corea del Norte. China ha construido sistemas subterráneos amplios para proteger capacidades militares, mientras Rusia continúa con la ampliación de instalaciones fortificadas. Corea del Norte también ha priorizado este tipo de infraestructura como respuesta a eventuales amenazas de ataque. La combinación del MOP con plataformas furtivas como el B-2 y el futuro B-21 proporciona a Estados Unidos un medio de ataque convencional aplicable a objetivos enterrados complejos.
El programa Next Generation Penetrator refleja que la Fuerza Aérea proyecta la aparición de nuevos tipos de amenaza. El general Allvin indicó que el NGP podría incorporar sistemas tecnológicos avanzados o métodos operativos actualizados para conservar capacidades operativas, incluso si los rivales logran neutralizar el GBU-57. Mientras tanto, las mejoras implementadas en las espoletas y demás subsistemas del MOP permiten mantener su funcionalidad en los escenarios actuales y próximos.
El aviso de contratación del AFLCMC corresponde a una acción para mantener el GBU-57 en condiciones de uso frente a entornos con amenazas diversas. La experiencia operativa en Fordo confirmó las propiedades de diseño del arma y señaló la necesidad de ajustes constantes para conservar su efectividad en misiones futuras.