Los F-35B de la Real Fuerza Aérea Británica (RAF, por sus siglas en inglés) volaron en combate por primera vez el 16 de junio de 2019.
Al despegar de la base aérea británica de Akrotiri en Chipre, un par de cazas furtivos F-35B de aterrizaje vertical patrullaron sobre Siria junto a los cazas Eurofighter Typhoon de la RAF, anunció el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
Los F-35 no lanzaron bombas ni dispararon misiles o armas durante su patrulla de combate. Sin embargo, la misión convirtió al Reino Unido en el tercer país, después de Israel y los Estados Unidos, en desplegar los F-35 en tiempo de guerra.
Sólo porque los F-35 no emplearan armas no significa que no puedan hacerlo. “Tampoco hemos tirado armas desde el Typhoon en ese período”, dijo a Evening Standard el capitán del grupo Jonny Moreton, comandante del Ala Aérea Expedicionaria 903 con base en Akrotiri. “No es una fase muy cinética de la operación en este momento”.
En abril, la RAF desplegó seis de sus 17 cazas F-35B a Akrotiri para realizar ejercicios y misiones de combate sobre Irak y Siria. Entre el 16 y el 25 de junio de 2019, los seis cazas de sigilo combinados volaron 13 misiones de combate. Cada misión involucró a un par de F-35 y, presumiblemente, a un par de Typhoon´s.
“Los F-35 son los aviones más avanzados que nuestro país ha poseído nunca y formarán la columna vertebral de la defensa aérea británica en las próximas décadas”, declaró la secretaria de Defensa Penny Mordaunt. “Han pasado todas las pruebas que su entrenamiento les ha lanzado con éxito y su primera misión operativa real es un paso significativo hacia el futuro del Reino Unido”.
La RAF está adquiriendo lentamente una flota de hasta 138 cazas F-35 a un costo de alrededor de 100 millones de dólares por aeronave como reemplazo de los aviones de guerra que ya ha retirado, incluidos los aviones de salto Harrier y los cazabombarderos Tornado.
Los Tornado’s operaron desde Akrotiri para misiones sobre Irak y Siria hasta febrero de 2019. Poco después, la RAF los retiró.
La Fuerza Aérea de Israel dijo que fue la primera en pilotar un F-35 en combate. En mayo de 2018, Jerusalén anunció que había desplegado el caza furtivo en dos frentes. El gobierno israelí hizo circular una foto de un F-35A israelí sobrevolando Beirut en el Líbano durante el día. Los cazas de guerra israelíes también operan con frecuencia sobre Siria.
Los F-35B del Cuerpo de Marines de Estados Unidos en septiembre de 2018 llevaron a cabo un ataque aéreo en apoyo de lo que la Marina de Estados Unidos describió como “operaciones de despeje terrestre” en Afganistán. La Fuerza Aérea de los EE.UU. voló su propio F-35A en combate por primera vez sobre Irak en abril de 2019. El Ejérito de los EE.UU. todavía está trabajando en sus escuadrones F-35C para su primer crucero de primera línea a bordo de un portaaviones, programado actualmente para 2021.
A pesar de un ritmo creciente de despliegues para el F-35, el programa multinacional que desarrolla y construye el tipo continúa luchando. La publicación comercial Defense News a principios de junio de 2019 reveló fallas persistentes en el diseño del F-35.
En loa ángulos de ataque altos, el F-35B y el F-35C compatibles con los portaaviones tienen una tendencia a salir del vuelo controlado, reportó Defense News.
“Específicamente, la variante de corto despegue y aterrizaje vertical de la Marina y la versión lanzada por el portaaviones de la Marina se vuelven difíciles de controlar cuando la aeronave está operando por encima de un ángulo de ataque de 20 grados, que es el ángulo creado por el aire que se aproxima y el borde de ataque del ala”, explicó Defense News.
Hasta ahora, la tasa de salida del F-35B en condiciones de guerra no es mejor que la tasa de salida que la flota remanente de los Tornados, de la década de 1980, logró en los años anteriores a su retiro. De acuerdo con el Financial Times, los ocho Tornados en Akrotiri en el 2015 lograron dos salidas de dos barcos por día, cada una de seis a ocho horas.
Los seis F-35 en Akrotiri, por su parte, volaron 95 misiones en las cuatro semanas anteriores a su primera misión de combate. Eso resulta en aproximadamente una salida cada dos días por caza, un ritmo de vuelo similar al que mantenían los Tornados.
Además de volar desde bases terrestres, los F-35B de la RAF a partir de finales de 2019 también operarán desde los dos portaaviones de clase Queen Elizabeth de la Marina Real.