Programas VENOM-AFT y ACE incorporan autonomía en F-16 desde 2023 hasta 2025, con pruebas en Eglin y Edwards y vuelo inaugural previsto para 2026.
Programas en Eglin y Edwards avanzan hacia capacidades de autonomía
La Fuerza Aérea de Estados Unidos adapta cazas F-16 para operaciones sin piloto mediante inteligencia artificial en programas militares. Los comunicados oficiales de la institución y de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa describen misiones de combate reales con sistemas autónomos. Los esfuerzos se concentran en Eglin, Florida, y Edwards, California, con avances registrados desde 2023 hasta julio de 2025. Estos avances sirven para evaluar capacidades que permiten tácticas aéreas sin intervención humana constante, según reportes de pruebas iniciales.
El programa Viper Experimentation and Next-gen Operations Model – Autonomy Flying Testbed, conocido como VENOM-AFT, modifica seis F-16C Fighting Falcon en Eglin para probar software de autonomía en entornos operativos. Tres aparatos llegaron en 2024 y el último aterrizó el 1 de abril de 2025. Las alteraciones incluyen un acelerador automático que regula superficies de control y empuje, además de ajustes en programas informáticos y componentes físicos. La instrumentación asegura comunicación entre la autonomía y sistemas de misión sin requerir actualizaciones en equipo heredado.
Coherent Technical Services, Inc. participa con su tecnología Mudbucket, que conecta agentes de inteligencia artificial con sistemas de vuelo, control de armas y misiones del F-16C. De este modo, comandos de la inteligencia artificial se traducen a instrucciones legibles por las computadoras de a bordo. Esta traducción permite pruebas sin modificaciones invasivas. Las simulaciones constituyen una etapa clave y ejecutan escenarios de combate a velocidades superiores al tiempo real para generar datos masivos. Los datos refinan comportamientos autónomos con base en repeticiones y comparaciones de decisiones.

Los ejercicios abarcan enfrentamientos uno contra uno y dos contra dos, dentro del rango visual y más allá. La repetición alcanza hasta mil iteraciones para analizar variaciones en decisiones y resultados. Las prácticas se iniciaron en 2024 y priorizan la seguridad mediante límites de maniobras dentro de parámetros que protegen al piloto de prueba. El piloto supervisa el proceso y puede activar o detener la autonomía en tiempo real. La integración de pruebas de desarrollo y operativas en la misma ubicación facilita colaboración y acelera iteraciones.
Puntos clave de VENOM-AFT, ACE y ejercicios en Eglin y Edwards
- Seis F-16C en Eglin reciben modificaciones para probar autonomía con Mudbucket.
 - El X-62A VISTA en Edwards ejecuta evaluaciones de inteligencia artificial desde 2023.
 - Demostración con dos XQ-58A Valkyrie opera junto a un F-16C y un F-15E en julio de 2025.
 
Demostraciones con X-62A y control autónomo en combate aéreo simulado

El programa Air Combat Evolution, o ACE, de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa, logra primeras pruebas en vuelo de algoritmos de inteligencia artificial que controlan un F-16 modificado en escenarios de combate aéreo. Las evaluaciones se realizaron en 2023 y continuaron en 2024. El X-62A VISTA, rediseñado en junio de 2021 por Lockheed Martin Skunk Works junto con Calspan, opera en la Escuela de Pilotos de Prueba en Edwards con una arquitectura de sistemas abiertos para incorporar aplicaciones de terceros.
La configuración del X-62A emula características de otras aeronaves y admite capacidades de aprendizaje automático. Esta configuración establece una plataforma para definir estándares de certificación de inteligencia artificial en el ámbito aeroespacial. El 2 de mayo de 2024, el secretario de la Fuerza Aérea Frank Kendall voló en el asiento delantero del X-62A durante una hora. La inteligencia artificial ejecutó maniobras tácticas contra una amenaza simulada sin aportes del secretario ni del piloto de seguridad. El piloto activa la inteligencia artificial mediante un botón en el mando.
La inteligencia artificial desarrollada por Shield AI se basa en aprendizaje por refuerzo, un método que entrena algoritmos mediante ensayo y error. El método premia acciones positivas y penaliza acciones negativas para interpretar el entorno y tomar decisiones. El agente autónomo, derivado de sistemas que ganaron competiciones de simulación en 2020, se organiza en bloques modulares que se reconfiguran para misiones específicas, como combates cercanos o tareas subsiguientes como reabastecimiento. La prueba demostró control autónomo en escenarios de alta intensidad.
Otra iniciativa relacionada integra plataformas colaborativas autónomas en ejercicios de equipo humano-máquina. En julio de 2025, en Eglin, un F-16C y un F-15E Strike Eagle, cada uno con piloto humano, operaron junto a dos XQ-58A Valkyrie. Los pilotos enviaron comandos que se tradujeron a instrucciones legibles por máquina. Software de Coherent Technical Services, Inc. facilitó esta interacción, redujo la carga de trabajo, elevó la conciencia situacional y mejoró la efectividad de la misión con supervisión estratégica y ética por parte de humanos.
Pruebas en tierra y calendario hacia vuelos autónomos con IA en 2026 de F-16

Las pruebas terrestres de F-16C modificados en Eglin avanzan en 2025, con la finalización del primer aparato próxima, según informes de Coherent Technical Services, Inc. La recopilación de datos guía ajustes en software y en integración de instrumentación con sistemas de misión reales del caza. El enfoque mantiene compatibilidad con equipo heredado sin actualizaciones forzosas, lo que conserva ritmos de ensayo y reduce riesgos técnicos. El proceso sostiene validaciones de seguridad durante supervisión de pilotos y controles de parámetros.
El vuelo inaugural de un F-16 habilitado con inteligencia artificial se programa para 2026. Este hito establece una etapa importante en el desarrollo de combates aéreos autónomos dentro de programas que la Fuerza Aérea y la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa impulsan. La meta consiste en complementar datos de autonomía con experimentos de inteligencia artificial que informan el programa de Aeronaves de Combate Colaborativas. El objetivo contempla desplegar plataformas no tripuladas como elementos que aumentan la capacidad operativa en entornos con oposición.
Los avances desde 2023 hasta julio de 2025 sirven para evaluar capacidades que permiten a las aeronaves ejecutar tácticas aéreas sin intervención humana constante. Las simulaciones generan datos masivos a velocidades superiores al tiempo real y refinan comportamientos con base en repeticiones, enfrentamientos uno contra uno y dos contra dos, dentro del rango visual y más allá. La integración de datos y pruebas operativas en Eglin y Edwards alimenta decisiones sobre certificación y sobre incorporación progresiva de funciones autónomas en unidades de prueba.
La seguridad ocupa prioridad durante prácticas que limitan maniobras agresivas dentro de parámetros que protegen al piloto de prueba. El piloto supervisa las evaluaciones, activa o detiene la autonomía en tiempo real y valida respuestas del sistema frente a amenazas simuladas. La colaboración entre el 40th Flight Test Squadron y el 85th Test and Evaluation Squadron, en la misma ubicación, facilita intercambio técnico y acelera iteraciones. Esta coordinación fortalece procedimientos y establece bases para futuras capacidades semiautónomas dentro del Departamento de Defensa.
			