La entrega de los cazas rusos Su-35 a Irán parece haberse detenido debido a problemas logísticos, geopolíticos y económicos.
Rumores de entrega de cazas Su-35 egipcios a Irán generan confusión
A finales de abril y principios de mayo, medios iraníes como Student News Network (SNN) y Khabar Online reportaron que el periódico kuwaití Al-Jarida afirmaba que los aviones Su-35, originalmente destinados a Egipto, serían entregados a Irán en las próximas semanas. Sin embargo, fuentes iraníes negaron estos informes. Fararu calificó de falsas las noticias sobre la inminente llegada de estos cazas.
Tras consultar al Ministerio de Defensa iraní, SNN retiró su informe. Aunque se confirmó que Irán había adquirido aviones Yak-130 y helicópteros Mi-28N de Rusia, el acuerdo sobre los Su-35 seguía sin materializarse. En noviembre del año anterior, el viceministro de Defensa iraní, Mehdi Farhi, había confirmado un acuerdo para recibir estos aviones de combate, pero las entregas no se han producido.
Se especula que la producción nacional de estos cazas podría haber reemplazado la compra de los Su-35, como sugirió el ministro de Defensa iraní, Mohammad-Reza Gharaei Ashtiani, a principios de 2023, al mencionar una posible reorientación estratégica.
Fuentes argelinas añaden otra capa de incertidumbre al acuerdo ruso-iraní
Mientras tanto, fuentes argelinas indicaron que Argelia podría estar interesada en adquirir o alquilar los Su-35 originalmente destinados a Egipto, lo que añade más confusión. A pesar de esto, ni Rusia ni Irán han anunciado oficialmente la transferencia de un solo Su-35 a Teherán.
Los observadores militares y blogueros rusos han mantenido un silencio notable sobre el tema. Algunos informes sugieren que Irán ha redirigido sus recursos hacia sistemas de defensa asimétricos, como misiles y defensa aérea, en lugar de comprar los Su-35, lo que posiblemente indica una reevaluación de sus prioridades militares.
Varios factores pueden estar retrasando la entrega, entre ellos los desafíos logísticos y las sanciones occidentales que afectan a Rusia. La guerra en Ucrania ha sobrecargado los recursos militares rusos, lo que también podría estar limitando la capacidad de Moscú para cumplir con este acuerdo.
Problemas económicos de Irán podrían estar detrás del retraso en la entrega
Por otro lado, las dificultades económicas de Irán podrían estar afectando su capacidad para completar los pagos e integrar estos cazas en su fuerza aérea. A pesar del entrenamiento de pilotos para operar los Su-35, los problemas internos en Irán podrían estar retrasando la adquisición.
Aunque Rusia continúa exportando armamento a pesar de la guerra en Ucrania, parece que Irán no ha priorizado la adquisición de estos aviones. Las dificultades financieras de Teherán pueden explicar su decisión de centrarse en la producción interna o en la compra de sistemas de defensa más asequibles.
La falta de avances en el acuerdo de los Su-35 ha generado especulaciones sobre la verdadera situación financiera de Irán, lo que refuerza la idea de que la producción nacional podría ser una salida estratégica para cubrir sus limitaciones.
Irán podría optar por aviones chinos J-10C en lugar de los Su-35
En los últimos meses, Irán ha mostrado interés en adquirir aviones de combate chinos J-10C, una alternativa más asequible que los Su-35. Este avión de generación 4++ está equipado con sistemas de radar avanzados y capacidad para misiles aire-aire, lo que lo convierte en una opción atractiva para modernizar la flota iraní.
El levantamiento del embargo de armas de la ONU a Irán en 2020 ha permitido que estas negociaciones avancen. Se especula que Irán podría adquirir hasta 36 J-10C, con el posible respaldo financiero de Qatar. Esto fortalecería considerablemente su fuerza aérea y capacidad defensiva en la región del Golfo Pérsico.
Este acuerdo está enmarcado en la cooperación entre China e Irán, establecida en un pacto estratégico de 25 años que incluye acuerdos militares, energéticos y económicos. Irán podría intercambiar acceso a sus recursos petrolíferos a cambio de estos aviones, en un acuerdo valorado en mil millones de dólares.
El futuro de la defensa aérea iraní: enfoque en capacidades asimétricas
A medida que el acuerdo con Rusia parece estancarse, Irán ha priorizado inversiones en capacidades de defensa asimétricas, incluyendo la producción de misiles y sistemas antiaéreos. Estas inversiones responden a las necesidades más urgentes de las facciones que Teherán respalda en Oriente Medio.
Mientras Irán continúa utilizando aviones obsoletos como los MiG-29 soviéticos y los F-5 estadounidenses, los informes indican que Rusia podría estar modernizando discretamente algunos de estos aviones. Aun así, la necesidad de una flota moderna de cazas sigue siendo una preocupación.
El interés en los aviones chinos J-10C refleja la búsqueda de alternativas más prácticas y asequibles, mientras que el acuerdo con Rusia por los Su-35 permanece en duda. La modernización de la fuerza aérea iraní dependerá de cómo evolucione la situación económica y geopolítica en los próximos años.