El día martes, Moscú fue sorprendida por un ataque inesperado que ha generado conmoción en toda la ciudad. En esta ofensiva, al menos ocho drones han logrado impactar diversos edificios, incluyendo aquellos que albergan a los ciudadanos en su vida cotidiana. Las autoridades rusas han atribuido estos ataques a Ucrania, calificándolos como un «atentado terrorista».
Aunque no se reportaron víctimas mortales, algunos residentes tuvieron que ser evacuados y los daños materiales han sido significativos. Estos acontecimientos solo profundizan la escalada de tensiones entre ambos países, que parecen estar lejos de llegar a un acuerdo.
El ataque a Moscú
El ataque aéreo que sufrió Moscú en la mañana del martes ha dejado a la ciudad en un estado de alerta sin precedentes. Al menos ocho drones no tripulados lograron burlar los sistemas de defensa y alcanzar el centro de la capital rusa. Estos vehículos aéreos impactaron varios edificios, incluyendo bloques de viviendas ubicados en áreas altamente pobladas. El objetivo de los atacantes parecía ser causar daño en áreas civiles y sembrar el pánico entre la población.
Las consecuencias de estos ataques no se hicieron esperar. Varios edificios resultaron dañados, y algunos residentes tuvieron que ser evacuados de sus hogares por precaución. Afortunadamente, no se registraron víctimas mortales, aunque una persona tuvo que ser hospitalizada debido a las heridas sufridas durante el incidente. Se estima que el número de drones utilizados en el ataque podría haber sido mucho mayor, según informes de medios independientes.

Aumento de tensiones
La atribución de estos ataques a Ucrania por parte de las autoridades rusas ha aumentado aún más las tensiones entre ambos países. El asesor presidencial ucraniano, Mykhailo Podolyak, ha negado rotundamente la responsabilidad directa de su país en este ataque con drones.
Sin embargo, sus declaraciones sugieren que Ucrania se siente satisfecha con el resultado y prevé un aumento en el número de ataques en el futuro. Estas palabras solo avivan aún más el fuego en un conflicto que parece no tener fin a la vista.
Incursión previa y acusaciones
Este ataque a Moscú se produce apenas días después de que fuerzas milicianas anti-Putin llevaran a cabo una incursión en el interior de Rusia, ocupando brevemente varios pueblos cercanos al puesto de control fronterizo de Graivoron. Estos eventos demuestran la volatilidad de la situación en la región y la disposición de ciertos grupos para llevar a cabo acciones agresivas.
Además, cabe recordar que hace apenas un mes, un par de aviones no tripulados apuntaron directamente al Kremlin en lo que fue descrito como un intento de asesinato del presidente Vladimir Putin. En aquel momento, Moscú responsabilizó a Kiev de este supuesto atentado, aunque las autoridades ucranianas negaron cualquier participación en el mismo. Estos incidentes previos han contribuido a una escalada constante de tensiones entre ambos países.

Respuesta de Rusia y discurso de Putin
A pesar de la situación tensa, el presidente ruso, Vladimir Putin, no tiene previsto realizar un discurso especial en este momento. Sin embargo, Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, ha intentado calmar los temores en relación a estos ataques. Según Peskov, los ataques con drones en Moscú son una respuesta directa al reciente ataque de Rusia contra uno de los centros de toma de decisiones en la capital ucraniana. El portavoz del Kremlin se refiere al ataque que tuvo lugar el domingo pasado y que fue considerado el mayor ataque ruso desde el inicio de la guerra. Según Peskov, estos eventos forman parte de un ciclo de acciones y reacciones en el conflicto.
Sin embargo, la capital ucraniana, Kiev, también ha sufrido un ataque aéreo ruso el mismo martes, siendo este el decimoséptimo ataque desde principios de mayo. Varios distritos de la ciudad fueron objetivo de estos ataques, que lamentablemente resultaron en la muerte de una persona y dejaron al menos siete heridos. El asedio ruso a Kiev ha alcanzado un nuevo nivel de intensidad, marcando una escalada en la ofensiva contra la ciudad más grande de Ucrania, según informó NBC News.

Tensiones entre Yevgeny Prigozhin y el Kremlin
Este último incidente ha aumentado las tensiones no solo entre Rusia y Ucrania, sino también entre el jefe del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, y el Kremlin. Prigozhin, quien dirige este grupo mercenario, ha culpado rápidamente a los líderes militares de su propio país por permitir que los ataques con drones se lleven a cabo.
Esta acusación pone de manifiesto las tensiones internas y las discrepancias entre los diversos actores involucrados en el conflicto.
Conclusión
El ataque con drones a Moscú ha dejado a la capital rusa en estado de alerta y ha profundizado las tensiones entre Rusia y Ucrania. Aunque las autoridades rusas han atribuido estos ataques a Ucrania, este último país niega cualquier responsabilidad directa.
Los incidentes previos, como la incursión en territorio ruso y el intento de asesinato de Putin, han exacerbado aún más la situación. En medio de la escalada de tensiones, las declaraciones y acciones de los líderes políticos y militares no hacen más que avivar el fuego de un conflicto que parece lejos de llegar a su fin.