El contrato incluye el diseño y pruebas del motor mejorado F135 para el caza F-35, garantizando su durabilidad y rendimiento en futuras actualizaciones.
El contrato de Pratt & Whitney: mejora del motor F135 para el caza F-35
El 30 de septiembre, Pratt & Whitney, parte de RTX, recibió un contrato de 1.310 millones de dólares para la actualización del motor F135 del caza F-35. Este acuerdo busca optimizar la durabilidad del motor, la cual ha sido comprometida por el aumento en los requisitos operacionales y la integración de nuevos sistemas. Según el plan, el primer motor operativo debería estar en servicio en 2029, siempre que el programa se desarrolle según lo previsto.
El contrato abarca diversos aspectos técnicos, incluyendo el diseño, análisis y pruebas del motor. La Marina está supervisando este proceso, el cual es crucial para garantizar que el F-35 pueda satisfacer las demandas futuras impuestas por la actualización del Bloque 4. Este nuevo bloque requerirá un mayor rendimiento, refrigeración y potencia eléctrica del motor F135.
Desde su adjudicación, Pratt & Whitney ha completado la revisión preliminar del diseño de la Unidad de Control Electrónico (ECU), y anticipa realizar la revisión crítica del diseño a mediados de 2025, un paso esencial previo al inicio de la producción. Este desarrollo está destinado a consolidar el liderazgo de la compañía en la tecnología de motores militares.
Desarrollo y desafíos en la gestión térmica del motor F135
La Oficina del Programa Conjunto F-35 ha designado a Lockheed Martin como el integrador principal del sistema de gestión térmica y de potencia (PTMS) del motor F135. Tras una exhaustiva investigación de mercado, se determinó que solo Lockheed tenía la capacidad para llevar a cabo esta función. Se espera que el contrato para la próxima fase del programa PTMU se adjudique en el otoño de 2024.
La necesidad de un nuevo PTMS se deriva de la sobrecarga del sistema actual, que está incapaz de soportar la electrónica adicional que exige el Bloque 4. La Oficina de Responsabilidad Gubernamental ha advertido que el sistema actual obliga al motor F135 a operar más allá de sus parámetros de diseño, lo que incrementa su desgaste y, a su vez, los costos de mantenimiento a niveles insostenibles.
Honeywell fabrica el PTMS actual, aunque Collins Aerospace ha preparado una propuesta para un sistema de refrigeración mejorado, el EPACS, con la intención de participar en una futura competición que podría comenzar a mediados de 2024. Esta solución es esencial para garantizar la eficacia operativa del F-35 en su rol multifuncional.
Retos del programa de propulsión del F-35 y opciones alternativas
La selección de la ECU como solución de propulsión del F-35 se produjo después de que el Pentágono decidiera no avanzar con los motores del Programa de Transición de Motores Adaptativos (AETP) de Pratt y GE Aerospace. Aunque se esperaba que los motores AETP proporcionaran un aumento del 30% en rendimiento, su incompatibilidad con la variante de despegue corto/aterrizaje vertical F-35B fue determinante para esta decisión.
El secretario de la Fuerza Aérea, Frank Kendall, expresó su pesar por no poder financiar el desarrollo del AETP para su flota de F-35, reflejando la presión financiera que enfrenta el programa. Sin embargo, el Pentágono se ha centrado en la ECU para asegurar la interoperabilidad entre las distintas variantes del caza, tanto para usuarios estadounidenses como extranjeros.
A pesar de la cancelación del AETP, Pratt sostiene que la ECU incorporará innovaciones desarrolladas durante este programa, lo que podría proporcionar mejoras significativas en el rendimiento del F135. Hasta la fecha, la compañía ha entregado más de 1.200 motores de producción F135, acumulando más de 900.000 horas de vuelo, lo que evidencia su compromiso con la excelencia en la propulsión militar.
Conclusiones sobre el futuro del motor F135 y el caza F-35
El contrato de Pratt & Whitney marca un paso crucial en la evolución del motor F135 del F-35. La actualización del núcleo del motor, junto con el desarrollo del PTMS, son aspectos fundamentales para mantener la competitividad y efectividad del caza en operaciones futuras. Con la presión de costos de mantenimiento y la necesidad de optimización del rendimiento, el enfoque en soluciones innovadoras es ineludible.
A medida que el programa avanza hacia la revisión crítica del diseño, será esencial para Pratt y sus socios implementar un enfoque riguroso en la gestión de riesgos, garantizando que los desafíos sean abordados de manera efectiva. La colaboración con Lockheed Martin en la integración de sistemas será determinante para el éxito del programa y la satisfacción de las necesidades operacionales de las fuerzas armadas.
En resumen, el futuro del motor F135 depende de la capacidad de Pratt para innovar y adaptarse a las exigencias cambiantes del F-35. Con la mirada puesta en las actualizaciones del Bloque 4 y el perfeccionamiento del PTMS, el camino hacia una mayor eficiencia y rendimiento en combate se perfila como un desafío estratégico a largo plazo.