Un informe del Comité de Relaciones Internacionales y Defensa señala deficiencias críticas en la preparación militar del Reino Unido y demanda una reforma urgente.
Informe de la Cámara de los Lores exige mayor inversión en defensa del Reino Unido
El Comité de Relaciones Internacionales y Defensa de la Cámara de los Lores ha emitido una dura advertencia sobre la falta de preparación militar del Reino Unido. El informe, titulado “Ucrania: una llamada de atención”, destaca fallas en la disuasión de la OTAN y del Reino Unido frente a la agresión de Rusia, y exige una reforma urgente de la estrategia y del gasto en defensa.
El documento, publicado el 26 de septiembre de 2024, expone lagunas significativas en las capacidades militares del Reino Unido y señala las deficiencias que ha sacado a la luz la guerra en Ucrania. Lord de Mauley, presidente del Comité, advierte que la invasión rusa ha puesto al descubierto debilidades importantes tanto en las fuerzas del Reino Unido como en la capacidad de la OTAN para sostener una guerra de gran escala.
El informe señala que sin una acción decisiva, el Reino Unido enfrentará serios desafíos de seguridad. Las decisiones tomadas en la próxima Revisión Estratégica de Defensa (SDR) serán determinantes para definir si el país puede seguir siendo un actor clave dentro de la OTAN.
El tamaño y equipamiento del Ejército británico, en la mira del informe
El Comité señala que el Ejército británico es demasiado pequeño para cumplir con sus compromisos dentro de la OTAN, con apenas 73.000 efectivos en activo y carencia de equipamiento esencial. Por lo tanto, recomienda aumentar el número de tropas y solventar problemas de reclutamiento y retención. También sugiere revitalizar la Reserva para mejorar la capacidad y resiliencia de las fuerzas.
El estado de la industria de defensa del Reino Unido es otra preocupación principal. El informe la describe como no preparada para un conflicto prolongado, debido a años de baja inversión y relaciones problemáticas con el gobierno. El Comité propone fomentar la confianza en el sector y ofrecer compromisos a largo plazo que permitan a la industria asumir riesgos y ampliar su producción.
Además, se hace hincapié en reformar el sistema de adquisiciones, considerado actualmente como lento y con falta de capacidad para asumir riesgos. Se recomienda colaborar con proveedores innovadores y empresas tecnológicas emergentes para impulsar la modernización en la industria de defensa.
El informe aboga por modernizar la disuasión y fortalecer las defensas aéreas
El informe cuestiona la efectividad de los métodos tradicionales de disuasión, como la postura militar y las capacidades nucleares, frente a amenazas híbridas modernas. Se pide una revisión urgente de la estrategia de disuasión del Reino Unido y se insta a la OTAN a adaptarse a las nuevas formas de conflicto, comprendiendo mejor las motivaciones rusas.
El texto resalta la importancia de la superioridad aérea en conflictos actuales, citando el uso de defensas aéreas en Ucrania. Recomienda al Reino Unido priorizar la inversión en sistemas integrados de defensa aérea y antimisiles para salvaguardar la seguridad colectiva de la OTAN.
El documento advierte sobre vulnerabilidades en el Reino Unido ante amenazas híbridas y cibernéticas, similares a los ataques rusos contra la infraestructura crítica ucraniana. Se sugiere que el gobierno desarrolle un esfuerzo integral para proteger la infraestructura nacional y mejorar la resiliencia.
Reino Unido ante crecientes desafíos globales y déficit presupuestario
El informe subraya la necesidad de reforzar los lazos con la OTAN y garantizar la defensa europea en un contexto de crecientes tensiones globales. La expansión militar de China, crisis en Oriente Medio y la persistente agresión rusa hacen urgente que el Reino Unido refuerce su posición defensiva.
La Cámara de los Lores alerta sobre la posibilidad de que el Reino Unido quede rezagado respecto a países como Polonia, Corea del Sur y Japón, que han incrementado su gasto militar ante amenazas emergentes. Asimismo, el Ministerio de Defensa enfrenta un déficit de 20.000 millones de libras, presionando aún más el presupuesto de defensa y poniendo en riesgo programas cruciales.
Con la culminación del SDR prevista para la primera mitad de 2025, el informe subraya que el gasto en defensa debe ser prioritario. El SDR tendrá que equilibrar los desafíos fiscales con la necesidad de mantener una postura de disuasión efectiva y garantizar la sostenibilidad a largo plazo de las fuerzas militares del Reino Unido.