Las estaciones de radar Rezonans-N, capaces de detectar misiles hipersónicos, se desplegarán en la península de Kola antes de fin de año, informa TASS citando una fuente de la industria de defensa rusa.
“Para mejorar las capacidades de combate de la Flota del Norte, dos estaciones Rezonans-N serán desplegadas en la Península de Kola en 2020. Ya se ha instalado un radar, el segundo ha sido entregado a la península y se espera que se instale antes de finales de 2020”, dijo la fuente.
Anteriormente, la Flota del Norte recibió tres estaciones de este tipo: dos en la región de Arkhangelsk, otra en el archipiélago de Novaya Zemlya. Así, la fuente señaló que “para finales de año, cinco ‘cazadores hipersónicos’ vigilarán las posibles rutas de los misiles en la zona de responsabilidad de la flota”.
Otra fuente de defensa dijo a la TASS en enero que el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas Rusas había decidido ordenar cinco estaciones Rezonans-N adicionales. Se planea instalar estos radares al este del archipiélago de Novaya Zemlya.
El sistema de radar de frecuencia ultra alta Rezonans-NE puede detectar, identificar y proporcionar información sobre los objetivos aerodinámicos hasta 600 km de distancia, los objetivos balísticos hasta 1.200 km y a altitudes de hasta 100 km. Una característica singular del sistema es su falta de antena giratoria: obtiene electrónicamente una visión circular del espacio, lo que mejora la fiabilidad de los detectores, prolonga su vida útil y reduce el consumo de energía. La estación de radar ha sido especialmente modificada para funcionar en las condiciones del Ártico.
El Pentágono dice que el desarrollo de medios hipersónicos para el ejército de los EE.UU. es la prioridad número uno. Según la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, al menos un tipo de misil hipersónico estadounidense debería ser probado para el 2022.