En una épica batalla de titanes del pasado, las fuerzas ucranianas y rusas chocan en un apasionante combate, desempolvando reliquias mortales de la era soviética. El imponente Strela-10, un sistema de defensa aérea de corto alcance que data de 1973, demuestra su letal eficacia en un escenario bélico donde los titanes de la guerra se enfrentan en un duelo sin cuartel.
Strela-10 en acción
Surgiendo de las sombras del pasado, el Strela-10 desafía a los modernos sistemas de misiles de la OTAN. A pesar de su antigüedad, este coloso soviético sigue siendo una herramienta devastadora en manos de sus operadores, capaz de derribar helicópteros y aeronaves enemigas con una precisión mortal.
A través de un vídeo compartido en la red, somos testigos del poder desatado de este mastodonte bélico. Observamos cómo el Strela-10, montado en un vehículo blindado MT-LB, se posiciona estratégicamente y apunta al cielo, preparándose para lanzar su carga mortal. En un abrir y cerrar de ojos, el misil es lanzado hacia su objetivo, desplazándose a una velocidad asombrosa, dejando a su paso un rastro de destrucción.
Fuerzas ucranianas destruyen el sistema de misiles ruso Strela-10
El ejército ucraniano, en su lucha incansable, no se queda atrás en el uso de estas máquinas de guerra. En una operación audaz y precisa, las Fuerzas de Operaciones Especiales de Ucrania logran destruir un sistema de misiles ruso Strela-10 y un vehículo anfibio en el frente sur. Demostrando su habilidad y astucia, utilizan drones de lanzamiento armados con granadas y municiones para atacar y eliminar al enemigo.
Este enfrentamiento de gigantes del pasado, reviviendo sus glorias bélicas, nos sumerge en una crónica apoteósica donde la tecnología militar, tanto antigua como moderna, se entrelaza en un apasionante duelo de poder y destrucción. Mientras el mundo observa con asombro, estas máquinas de guerra continúan demostrando su letalidad en el campo de batalla, recordándonos que el pasado no está tan lejano como creemos.