Video muestra ataque ucraniano con dron Switchblade 600 que elimina un lanzador y radar Buk-M3 ruso en un golpe preciso.
Ataque ucraniano con Switchblade 600 neutraliza sistema Buk-M3
Un video difundido en redes sociales captó un ataque ejecutado por fuerzas ucranianas utilizando una munición merodeadora Switchblade 600, suministrada por Estados Unidos, contra un sistema de defensa aérea ruso Buk-M3. El objetivo fue un 9A317M Transporter Erector Launcher and Radar [TELAR], componente esencial del avanzado sistema antiaéreo. La grabación muestra el impacto directo del dron, que destruyó el lanzador y el radar, inutilizando una unidad clave para la defensa aérea rusa. Este incidente destaca la efectividad de las armas occidentales en la guerra y la capacidad ucraniana para neutralizar tecnología militar rusa de última generación.
La Switchblade 600, fabricada por AeroVironment, es una munición merodeadora diseñada para misiones de alta precisión. Con un alcance de 40 kilómetros y una autonomía de 40 minutos, puede transportar una ojiva antitanque capaz de perforar blindajes avanzados. En el video, el dron identifica el 9A317M TELAR y ejecuta un ataque quirúrgico, explotando las vulnerabilidades del sistema ruso. El Buk-M3, conocido por su capacidad para interceptar misiles de crucero, aviones y drones, representa una amenaza significativa en el campo de batalla, lo que hace su destrucción un logro táctico relevante para Ucrania.
El sistema Buk-M3, desarrollado por Almaz-Antey, es una evolución de la familia Buk, con mejoras en alcance, precisión y capacidad de seguimiento. Cada batería incluye un radar de adquisición, un puesto de mando y varios lanzadores con misiles 9M317M, diseñados para contrarrestar amenazas aéreas a distancias de hasta 70 kilómetros. La pérdida de un 9A317M TELAR no solo reduce la capacidad operativa de la batería, sino que también expone las limitaciones de los sistemas rusos frente a tácticas asimétricas empleadas por Ucrania.
El ataque ocurrió en un contexto de intensificación de las operaciones ucranianas contra activos rusos de alto valor. Fuentes de inteligencia occidentales, citadas por Defense News, indican que Ucrania ha priorizado la eliminación de sistemas de defensa aérea para facilitar operaciones con drones y misiles. La asistencia militar de Estados Unidos, que incluye el suministro de cientos de Switchblade 600 desde 2022, ha fortalecido estas capacidades. Según el Departamento de Defensa de EE. UU., las entregas de estas municiones se aceleraron tras la invasión rusa, con un enfoque en contrarrestar la superioridad aérea inicial de Rusia.
Datos clave sobre el ataque y los sistemas involucrados
- Switchblade 600: Dron merodeador con alcance de 40 km, ojiva antitanque y precisión guiada por GPS y cámaras.
- Buk-M3: Sistema antiaéreo ruso con misiles 9M317M, capaz de interceptar objetivos a 70 km de distancia.
- 9A317M TELAR: Lanzador y radar integrados, componente crítico para la operación autónoma del Buk-M3.
- Fecha del ataque: No confirmada, pero el video se viralizó en mayo de 2025 en plataformas como X.
- Impacto táctico: La destrucción del TELAR debilita la defensa aérea rusa, facilitando operaciones aéreas ucranianas.
Contexto operativo y tecnológico del enfrentamiento
La destrucción del Buk-M3 refleja la creciente dependencia ucraniana de tecnología avanzada proporcionada por aliados occidentales. La Switchblade 600 se distingue por su portabilidad y facilidad de uso, lo que permite a pequeñas unidades ejecutar ataques precisos sin exponerse a contraataques. Informes de Jane’s Defence Weekly señalan que Ucrania ha integrado estas municiones en operaciones coordinadas, combinándolas con inteligencia en tiempo real para maximizar su impacto. En este caso, el video sugiere que el ataque se basó en datos precisos sobre la ubicación del 9A317M TELAR.
Por su parte, el Buk-M3 es un pilar de la defensa aérea rusa, diseñado para operar en entornos de alta amenaza. Sin embargo, su complejidad logística y la necesidad de personal altamente capacitado lo hacen vulnerable a interrupciones. Según The Drive, la pérdida de componentes como el 9A317M requiere meses de reparación o reemplazo, lo que afecta la disponibilidad de baterías operativas. Este incidente se suma a reportes previos de ataques ucranianos contra sistemas rusos, incluidos S-400 y Pantsir, lo que indica un enfoque estratégico para erosionar la capacidad aérea enemiga.
El uso de la Switchblade 600 también resalta la evolución de la guerra moderna, donde los drones merodeadores desempeñan un papel central. A diferencia de los misiles tradicionales, estas armas permiten a los operadores ajustar el objetivo en tiempo real, minimizando daños colaterales. El Instituto de Estudios Estratégicos señala que la proliferación de estas tecnologías ha transformado los campos de batalla, obligando a ejércitos como el ruso a adaptar sus defensas. La incapacidad del Buk-M3 para detectar o neutralizar la Switchblade 600 plantea preguntas sobre su efectividad contra amenazas de baja firma radar.
El video, aunque no verificado de forma independiente, coincide con patrones de ataques previos documentados por OSINT (inteligencia de fuentes abiertas). Analistas de Bellingcat han corroborado la autenticidad de grabaciones similares, utilizando metadatos y referencias geográficas. La difusión del material en plataformas como X amplifica su impacto propagandístico, reforzando la narrativa ucraniana de superioridad táctica frente a Rusia.
Implicaciones estratégicas y antecedentes de la guerra
La eliminación del 9A317M TELAR tiene implicaciones más amplias para la guerra en Ucrania. La reducción de sistemas antiaéreos rusos facilita la operación de drones ucranianos, como el Bayraktar TB2, y el uso de misiles como el HIMARS. Según Defense One, Ucrania ha destruido o dañado al menos 15 sistemas Buk desde 2022, lo que ha debilitado la capacidad rusa para proteger sus líneas de suministro y posiciones defensivas.
El suministro de Switchblade 600 forma parte de un paquete de asistencia militar de Estados Unidos valorado en miles de millones de dólares. Desde el inicio de la guerra, el Congreso de EE. UU. ha aprobado múltiples partidas para equipar a Ucrania con armas avanzadas, incluyendo drones, misiles Javelin y sistemas NASAMS. Un informe del Pentágono detalla que, hasta octubre de 2024, se entregaron más de 700 Switchblade de ambos modelos (300 y 600), con planes para incrementar los envíos en 2025.
Por el lado ruso, la pérdida de activos como el Buk-M3 agrava los desafíos logísticos. La industria de defensa rusa, afectada por sanciones internacionales, enfrenta dificultades para reponer sistemas complejos. Reuters informó que la producción de misiles y radares se ha reducido significativamente, lo que limita la capacidad de Rusia para sostener una guerra prolongada. Este escenario beneficia a Ucrania, que ha demostrado habilidad para explotar estas debilidades con apoyo occidental.
El incidente también subraya la importancia de la guerra electrónica y la inteligencia en la guerra. La Switchblade 600 probablemente evadió las defensas del Buk-M3 gracias a su baja firma radar y a la posible supresión de sistemas de detección rusos. Informes de Military Technology indican que Ucrania ha recibido equipos de guerra electrónica de NATO, lo que mejora su capacidad para neutralizar radares enemigos antes de los ataques.