El pasado fin de semana, la Marina de Estados Unidos celebró la botadura del futuro USS Cleveland (LCS-31), el último buque de combate litoral de la clase Freedom, en una ceremonia en Marinette, Wisconsin.
Un evento histórico
La botadura marcó el fin de una era, ya que fue la última en utilizar la técnica de deslizamiento lateral por una rampa. A partir de ahora, se utilizará un sistema de shiplift en el astillero. La ceremonia contó con la presencia de 3.000 invitados, incluidos dignatarios, empleados del astillero y personal de la Marina.
A pesar de su tamaño relativamente pequeño, la construcción del buque requirió un enorme esfuerzo y aún necesita un año de trabajo antes de ser entregado a la Marina de Estados Unidos.
El evento también tuvo un incidente, ya que el buque colisionó con un remolcador durante la botadura.
Problemas con el programa LCS
El programa Littoral Combat Ship ha estado plagado de problemas durante años, con la Marina invirtiendo miles de millones de dólares en él. Estos buques fueron diseñados para combatir amenazas asimétricas en aguas litorales o cercanas a la costa, pero ahora se consideran inadecuados para conflictos con adversarios como China o Rusia.
Los buques han enfrentado problemas de averías y defectos en la práctica, lo que ha llevado a algunos marineros a apodarlos despectivamente como «pequeños barcos de mierda«.
Además, los LCS no encajan en la composición a largo plazo de la flota de la Marina de Estados Unidos, que seguirá estando formada por portaaviones, destructores y otros combatientes de superficie que llevan décadas en servicio.
Recortes en el Congreso y adaptación al mundo geopolítico
El Congreso también recortó la financiación de los módulos de misión, lo que dejó a la Marina de Estados Unidos con buques pequeños y rápidos que no están a la altura del cambiante mundo geopolítico.
Algunos oficiales han pedido que se les regale a socios sudamericanos, ya que los buques han demostrado ser muy adecuados para la interdicción de drogas, pero aparentemente poco más.
No está claro si el futuro USS Cleveland ha abordado algunas de estas cuestiones o si el programa LCS continuará desempeñando un papel en aguas como el mar de China Meridional.
El legado del USS Cleveland
El LCS-31 será el cuarto buque de la Marina estadounidense bautizado en honor de la segunda ciudad más grande de Ohio. Los buques anteriores que llevan el nombre de USS Cleveland incluyen un crucero protegido, un crucero ligero de la clase Cleveland y un muelle de transporte anfibio, todos con un historial de servicio y condecoraciones notables.
El futuro de los Buques de Combate Litoral
El programa LCS no ha funcionado como estaba previsto, y los problemas a lo largo de los años han generado dudas sobre su utilidad en el Ejército de Estados Unidos. El futuro de estos buques y su papel en la Marina aún está por determinarse, pero su historia y legado en la construcción naval de la nación son innegables.