Las advertencias de un inminente ataque aéreo ruso volvieron a sonar ayer en Ucrania. Las informaciones de dudosa reputación procedentes de un canal bielorruso de Telegram de la oposición alarmaron a las autoridades ucranianas. Algunos medios de comunicación ucranianos también comenzaron a publicar información de fuentes bielorrusas.
Según el canal de Telegram de la oposición de Minsk, un bombardero supersónico ruso MiG-31 con un misil Kinzhal [Daga en español] a bordo despegó de una base aérea en Bielorrusia. Esto causó “pánico” en algunas fuentes de noticias ucranianas. Más tarde, sin embargo, la información fue desmentida y clasificada como “fake news”.
Sin embargo, en una situación militar, las autoridades ucranianas deben “ir a lo seguro”, especialmente después de que Moscú realizara tres ataques con misiles contra la infraestructura energética de Ucrania en sólo un mes. Parece que Moscú no tiene previsto detenerse, sino que, por el contrario, los analistas militares creen que Rusia tiene la intención de completar el sistema energético ucraniano.
Ucrania juega a lo seguro
Aunque el “falso” MiG-31 resultó estar todavía en tierra, las autoridades ucranianas se están preparando para nuevos ataques rusos. Una opinión similar expresó el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, en uno de sus discursos del pasado domingo 27 de noviembre. Según Zelensky, “los terroristas [como él llama a las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa] están preparando nuevos ataques y mientras tengan misiles, no descansarán”. Zelensky analizó en su discurso que la próxima semana podría resultar tan difícil como la anterior. “Estamos trabajando en todos los escenarios, incluso con los socios”, dijo también Zelensky, sin dar más detalles.
Aunque no está claro cuáles son exactamente los “socios” que están ayudando a hacer frente a los ataques de misiles rusos, los analistas militares dijeron que la participación de los aliados y socios de Ucrania involucrados proporcionó una gran cantidad de inteligencia. Información similar es recogida por los drones de reconocimiento que sobrevuelan el Mar Negro, así como por los aviones de alerta temprana que vuelan a lo largo de la frontera con Ucrania.
Recientemente informó de que, además de las infraestructuras energéticas de Ucrania, Moscú tiene en el punto de mira los centros de datos que transfieren precisamente esa información de la fuente al receptor.
No ignorar las señales
El jefe de la región de Kyiv Mykolaev, Vitaly Kim, expresó una opinión similar a la del presidente. Aunque la información sobre el despegue del MiG-31 desde Bielorrusia resultó ser falsa, “no hay que ignorar tales señales”.
El Sr. Kim recordó que la aviación rusa es activa en el aire, pero está familiarizada con sus acciones. Kim recordó que recientemente se avistaron “objetos voladores enemigos”, pero que ya no están activos en el este de Ucrania. El Sr. Kim sugiere que esos vuelos son “vuelos de prueba” disfrazados de vuelos de entrenamiento, sin especificar lo que eso significa.
Ucrania está preparada
En medio de estas noticias falsas, así como de las señales en las redes sociales sobre ataques aéreos sobre Kiev, el Sr. Yuriy Ignat, portavoz del Mando de la Fuerza Aérea Ucraniana, anunció que Ucrania está preparada para hacer frente a los próximos ataques de misiles rusos.
“Nuestras tropas están preparadas, los misiles están cargados, responderemos, derribaremos como siempre lo hacemos”, anunció. Además, Ignat concluyó analizando que los peores meses para Ucrania y sus ciudadanos fueron febrero y marzo, cuando un número extraordinario de cohetes voló hacia el país.
A pesar de las tranquilizadoras palabras del Sr. Ignat, parece que existe pánico tras los casi continuos informes de ataques inminentes.
2022: Invasión rusa de Ucrania
El 21 de febrero de 2022, el gobierno ruso afirmó que los bombardeos ucranianos habían destruido una instalación del FSB en la frontera entre Rusia y Ucrania. Moscú también afirmó que había matado a 5 soldados ucranianos que intentaron cruzar a territorio ruso. Ucrania negó estar implicada en ambos incidentes y los calificó de bandera falsa.
Ese mismo día, el gobierno ruso reconoció formalmente a las autoproclamadas DPR y LPR como estados independientes. Según Putin, no sólo en sus zonas controladas de facto, sino en el conjunto de las provincias ucranianas. Putin ordenó a las tropas rusas, incluidos los tanques, que entraran en las regiones.
El 24 de febrero de 2022, Putin ordenó una invasión de Ucrania por parte de las fuerzas armadas rusas, previamente concentradas a lo largo de la frontera. La invasión fue seguida por ataques aéreos selectivos contra edificios militares en el país. La invasión fue seguida también por tanques dirigidos que entraron a través de la frontera con Bielorrusia.
Hasta ahora, Rusia no ha reconocido la invasión de Ucrania como una “guerra”, aunque eso es exactamente lo que es, alegando que se trata de una “operación militar especial”. Según la ONU, en la que Rusia tiene su representación permanente, para que una acción militar se defina como “operación militar especial”, debe contar con una resolución emitida por la ONU. No existe tal resolución, lo que define automáticamente las acciones militares de los rusos como una invasión y una guerra contra los ciudadanos de Ucrania.